El último informe de Panda Security recoge la espectacular cifra de 18 millones de nuevas muestras de malware creadas en el segundo trimestre del año, lo que supone la captura de 200.000 muestras diarias. Los troyanos siguen a la cabeza del ranking, liderando las muestras de malware, y se incrementan los ataques del tipo ransomware englobados dentro de esta categoría.
Ganar dinero es la principal motivación del cibercrimen y esto puede conseguirse de varias maneras: a través del ransomware, robando información a usuarios y empresas o, en algunas ocasiones, atacando directamente a los bancos. Team Skeet, sitio web de distribución de vídeos pornográficos perteneciente a la red de Paper Street Media, sufrió un ataque en el que le fueron robados los datos de 237.000 usuarios incluyendo sus direcciones físicas; información sensible que se ha puesto a la venta en el mercado negro a un precio desmesurado: 400 dólares por credencial y un total de 95 millones de dólares por todas ellas.
Otro sonado robo de información de los últimos meses lo ha sufrido la página de contactos beatifulpeople.com, de la que 1.100.000 usuarios vieron como sus datos quedaban al descubierto. También está el caso del fabricante de ordenadores Acer, en cuya tienda online se han robado datos de 34.500 usuarios y han estado comprometidos un año sin haberse percatado hasta ahora. Todos los ataques perpetrados tienen algo en común: una alta cifra a pagar por el rescate de la información robada y cuyo pago no garantiza la recuperación de la totalidad de los datos.
Auge de ataques a TPV y entidades financieras
Uno de los robos más extendidos y populares en los últimos meses son los que afectan a los TPV o terminales para puntos de venta, como el cometido por PunkeyPos, un malware analizado por PandaLabs que ha puesto en jaque a más de 200 restaurantes en Estados Unidos, robando información de las tarjetas de crédito utilizadas en dichos terminales de los establecimientos.
También ha habido casos de robos directos a bancos, como el perpetrado en el Banco Central de Bangladesh, donde los cibercriminales consiguieron llevarse 81 millones de dólares. Posteriormente se ha sabido que han ocurrido al menos dos casos similares, uno contra un banco de Vietnam y otro contra un banco de Ecuador.