El Mobile World Congress ha sido el foro elegido por el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), sociedad dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo a través de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, para concienciar sobre la importancia de prestar atención a la seguridad de los dispositivos móviles, un tema de actualidad que por primera vez se trata en el evento internacional más importante relacionado con la industria del móvil.
En representación de la industria española, los expertos en ciberseguridad Chema Alonso y Raúl Siles han sido los encargados de explicar cuáles son las principales amenazas que acechan la seguridad de los teléfonos móviles y qué estrategias se pueden poner en marcha para prevenir o mitigar los efectos de un ataque a nuestra privacidad o de un robo de información financiera o de credenciales, que suelen ser los ciberdelitos más frecuentes.
Chema Alonso ha indicado que el usuario de aplicaciones móviles debería asegurarse de leer bien los términos y las condiciones antes de aceptarlas “para que no sean excesivos” y ha puesto como ejemplo la app de la linterna del móvil. Asimismo, ha recordado que se han eliminado un millón de aplicaciones del market de Google por motivos de seguridad.
Por su parte, Raúl Siles ha destacado que “la identificación de vulnerabilidades por parte de la ‘comunidad de investigadores’ es fundamental para las empresas que desarrollan seguridad” y ha añadido que “el desarrollo de soluciones debe basarse en la seguridad y privacidad desde el diseño”. Haciendo un guiño al cómic de Spiderman ha señalado que “el poder de los móviles lleva aparejado una gran responsabilidad”, por lo que es crucial prestar atención a la seguridad, a los desafíos de la tecnología móvil y seguir las tendencias de la privacidad. En este sentido, ha incidido en la importancia de identificar estrategias de protección y técnicas de mitigación.
Por último, el director de Operaciones de INCIBE, Alberto Hernández, ha hablado de la necesaria colaboración público-privada en el ámbito de la ciberseguridad y ha asegurado que “la ciberseguridad no es solamente un problema, sino una oportunidad para la industria”. Asimismo, ha recalcado que “los dispositivos móviles pueden ser una ventana para los cibercriminales” y ha incidido en la necesidad de “desarrollar estrategias y soluciones que minimicen los riesgos a los que nos exponemos”.
Desde INCIBE se recuerda que cada año se detectan más de 140.000 programas maliciosos para smartphones o tabletas. Dependiendo de las medidas de protección que se hayan añadido al dispositivo móvil o las que se hayan eliminado, los ciberdelincuentes podrán obtener más o menos información de nuestro móvil.
Entre los síntomas que nos pueden servir para detectar que nuestro móvil ha sido ‘infectado’ se encuentran los ruidos en las conversaciones de teléfono, mensajes y correos electrónicos que aparecen como leídos o que desaparecen, menor durabilidad de la batería, mayor consumo de datos o la aparición de nuevas aplicaciones.