Las empresas cuentan con infraestructuras cada vez más heterogéneas, y por ello necesitan adaptar sus políticas de seguridad a esta nueva realidad. Pero esto supone un riesgo, ya que el 36% de las compañías españolas encuestadas permite a sus empleados acceder sin ningún tipo de restricción a los recursos de la empresa desde sus smartphones, de acuerdo con los resultados de un estudio llevado a cabo por BSB International en colaboración con Kaspersky.
Entre los datos obtenidos en España, resulta destacable que el 22% de las compañías utiliza algún tipo de restricción en el uso de los smartphones, incluyendo prohibiciones al acceso de algunos recursos en red, el 17% prohíbe cualquier tipo de acceso desde dispositivos móviles, pero sólo el 6% utiliza un software de Administración de Dispositivos Móviles (Mobile Device Management o MDM) para asegurar que se cumplen las políticas corporativas de seguridad. En la actualidad, sólo el 20% de empresas españolas reconocer haber hecho frente a la pérdida de información corporativa debido a la pérdida o robo de dispositivos móviles.
Pero, además, el fenómeno BYOD también tiene sus riesgos, ya que muchas compañías se comportan de manera peligrosa, no estableciendo ninguna restricción al uso de dispositivos personales, a pesar de que un 34% de los encuestados piense que el uso de los dispositivos personales presenta una amenaza para el negocio, y un 55% cree que la reducción de este riesgo es un tema importante para la empresa. Los riesgos derivados de almacenar información relacionada con el trabajo en los dispositivos personales son muchos, pero sólo el 8% de las compañías en España tiene entre sus planes introducir algún tipo de control estricto en su uso en un futuro. Además, un 40% de los especialistas españoles de TI encuestados está seguro de que, aunque se tome cualquier tipo de medida, el número de dispositivos personales en el lugar de trabajo sólo va a incrementarse por lo que las empresas deberán adaptar sus políticas de seguridad a la nueva situación.