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La brecha del talento
Nos encontramos ante un escenario en el que la tecnología ha pasado a ser una parte indispensable de nuestro día a día. Este auge también se evidencia en el entorno laboral, tanto es así que el mercado tecnológico en España ha alcanzado un hito significativo. Y es que según el Informe de Empleo Tecnológico del Mercado Laboral Español de la UGT, a principios de este mismo año, el empleo tecnológico superó por primera vez el millón de puestos de trabajo en España. Sin embargo, a pesar de ser un ámbito lleno de oportunidades, la realidad a la que nos enfrentamos es que las vacantes del sector TI representan una fracción minúscula del mercado laboral, reflejando un desajuste preocupante entre la oferta y la demanda (debido a la brecha del talento). Este desajuste causa dificultades tanto para las empresas que buscan trabajadores cualificados como para los profesionales en busca de empleo.
Es innegable que estamos viviendo un periodo dominado por la inflación y la pérdida de poder adquisitivo, lo que ha llevado a que el talento busque mejores condiciones laborales que integren modelos de compensación y planes de beneficio
ALICIA RUIZ, THE COCKTAIL
Factores que contribuyen a la escasez de talento
En este sentido, en muchas ocasiones son las empresas las que pueden generar esa escasez de talento a partir de varios factores, siendo las condiciones laborales uno de los esenciales. Es innegable que estamos viviendo un periodo dominado por la inflación y la pérdida de poder adquisitivo, lo que ha llevado a que el talento busque mejores condiciones laborales que integren modelos de compensación y planes de beneficio, sin olvidar las condiciones de salario que se pueden encontrar a nivel internacional. A pesar de ello, todavía existen empresas que no cumplen con las políticas de conciliación y la desconexión del trabajador y además – algo que se ha vuelto esencial entre el talento TI – no se facilita la flexibilidad horaria ni el teletrabajo.
Desafíos de la digitalización y la obsolescencia laboral
No solo eso. Estos últimos años nos han demostrado el rápido avance de la digitalización y la tecnología. Sin embargo, gran parte de las empresas no invierten lo suficiente en el desarrollo profesional de sus trabajadores, fomentando la obsolescencia laboral. Junto a ello observamos que en muchas ocasiones los empleados de esta área deben enfrentar altas cargas de trabajo y plazos ajustados, dando lugar a un grave desgaste profesional. Y es que algo que hemos aprendido en los últimos años es que la falta de equilibrio entre la vida laboral y personal, combinada con la presión constante, puede conllevar altos niveles de estrés y agotamiento. Por último, y aunque parezca algo trivial, muchas empresas no invierten en desarrollar una cultura corporativa y un clima organizacional sólido y atractivo.
Estrategias para abordar la brecha del talento
A pesar de ello, las empresas pueden afrontar estos retos de manera interna. Para ello, es esencial que cuenten con un modelo basado en la autorresponsabilidad y la autogestión que favorezca el equilibrio de la vida profesional y personal, además de ofrecer un paquete salarial competitivo. Las empresas deben distribuir la carga de trabajo de manera equitativa y realista, evaluar y ajustar los plazos de entrega para que sean alcanzables, y realizar reuniones periódicas para ver el estado y progreso de los proyectos. También detectamos que es necesario contar con un equipo de Talent con perfiles especializados en cada una de las áreas, que conozcan el lenguaje de cada uno de los targets de la compañía. De este modo, los trabajadores sentirán el esfuerzo que realiza la empresa para adaptarse a ellos, siendo una forma más de arraigar ese sentimiento de pertenencia.
La Importancia de la formación continua
No solo eso, sino que se hace indispensable mantener a los empleados actualizados y competitivos. Y es que la formación continua es esencial en este mercado, debido al rápido avance tecnológico. Para ello, es esencial realizar un análisis para detectar tanto las necesidades conjuntas de cada área como a nivel individual, para posteriormente implementar planes de formación individualizados que no sólo estén enfocados en las diferentes especializaciones de cada trabajador, sino también en otros ámbitos, para que puedan aprender y adaptarse a diferentes lenguajes y herramientas, así como en soft skills.
Conclusión: maximizar el potencial del mercado tecnológico
El panorama tecnológico en España ofrece un sinfín de oportunidades, pero también enfrenta importantes desafíos que deben ser abordados para maximizar su potencial. Las empresas juegan un papel crucial en este proceso para poder cerrar esa brecha entre la oferta y la demanda de talento cualificado, creando un entorno laboral más justo, equilibrado y atractivo. La inversión en el bienestar y desarrollo profesional de los empleados no es solo una estrategia competitiva, sino una necesidad en un mercado en constante evolución.
