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Automatización de TI, en qué ayuda
En el entorno de incertidumbre actual, no es ningún secreto que la automatización de TI está ayudando a muchas empresas a prosperar. Además, ofrece numerosas ventajas a toda la organización, que van desde la colaboración hasta una mayor seguridad, y contribuye a que los negocios puedan hacer frente a los retos presentes y futuros.
Antes de explorar estas ventajas o conocer las barreras que están frenando la implantación de la automatización integral del TI es fundamental entender qué es. Se trata de un concepto que define la automatización de procesos de TI relevantes en todos los equipos de TI de una organización.
Ventajas de la automatización integral de TI
La automatización de la empresa ya está causando un gran impacto en la comunidad de TI. Según el estudio Red Hat “Sobrevivir al cambio mediante la automatización de la empresa”, el 100% de los responsables de TI encuestados en Alemania, España, Francia y Reino Unido reconoce las ventajas de la automatización integral del TI de la empresa, aportando una mayor eficiencia, velocidad, agilidad y competitividad.
Entre las ventajas que aporta a la empresa podemos enumerar desde una mayor capacidad para seguir el ritmo del desarrollo tecnológico hasta un mejor equipamiento para gestionar el impacto del cambio climático o el creciente aumento de los ciberataques. En España, en particular, la automatización integral del TI facilita un mayor acercamiento al cliente. Por ejemplo, para el 31% de los profesionales de TI en España el principal beneficio de la automatización hoy en día es ofrecer un mejor servicio y experiencia para el cliente.
Qué es la automatización de TI
Sin embargo, aunque la automatización integral del TI ayuda a impulsar la innovación empresarial, las organizaciones también se enfrentan a una serie de retos a mayor escala. Entre los retos destacados por los responsables de TI están los recortes presupuestarios, los silos empresariales y las dificultades para encontrar talento, así como para retenerlo. Para que las organizaciones puedan aprovechar los beneficios de la automatización, es necesario que puedan primero superar estos obstáculos.
En el proceso para desarrollar una estrategia de automatización integral del TI, es necesario enfocarse en los tres pilares que facilitarán su adopción:
Compromiso de los equipos con el cambio
Los equipos serán fundamentales para el éxito de una estrategia de automatización integral del TI de la empresa. Por muy sólida que sea la estrategia o la plataforma tecnológica, si los empleados no están abiertos al cambio o no cuentan con los conocimientos adecuados, el proceso global no tendrá éxito.
Para lograr una gestión del cambio eficaz al implantar la automatización integral del TI de la empresa, los responsables de TI deben ser claros con sus empleados desde el principio. Comunicar los beneficios ayudará a garantizar una implementación de la automatización más fluida, al igual que impartir formaciones para garantizar que los equipos cuentan con las habilidades necesarias para gestionar el cambio, que es la estrategia principal para permitir un cambio exitoso para el 28% de los líderes de TI en España.
Implicar a los empleados en todas las fases del proceso de automatización también ayudará a comprender mejor las ventajas de la automatización en el trabajo diario, así como hacer ágil el desarrollo de tareas manuales para que cada uno pueda dedicar más tiempo a tareas de valor añadido y aumentar la colaboración de los equipos. Esto, a su vez, ayudará a crear un equipo de defensores de la automatización dentro de la empresa e inspirará al resto de la plantilla para que acoja los nuevos procesos.
Fluidez en los procesos evitando los silos
La adopción de la automatización puede estar muy aislada dentro de una empresa, con múltiples equipos implementándola en diferentes niveles de madurez. Las estructuras de equipos aislados dentro de las grandes empresas pueden ser difíciles de evitar, pero también provocan enfrentamientos entre los equipos y reducen la colaboración. Como resultado, los silos dificultan la creación de una estrategia de automatización integral del TI para toda la empresa.
Tener reuniones periódicas entre equipos puede reducir los silos y fomentar el intercambio de conocimientos, lo que a su vez conduce a un despliegue más inteligente de la automatización. La transparencia en torno a la seguridad y el cumplimiento de cualquier cambio en los procesos, así como el trabajo con los equipos para acordar KPI específicos que les beneficien, ayudarán a unificar a la plantilla y a tranquilizarla sobre cualquier cambio en sus prácticas de trabajo.
Es importante recordar que, al introducir nuevos procesos automatizados, no se están sustituyendo los procesos existentes, sino que se están enriqueciendo con nuevas capacidades para mejorar el trabajo de los equipos en toda la empresa.
Elección de la plataforma tecnológica adecuada
Al adoptar la automatización, las organizaciones pueden desbloquear la innovación y las capacidades de las tecnologías avanzadas, como la IA, el big data y la nube. Sin embargo, para ello, deben asegurarse de haber implementado la plataforma de automatización adecuada.
Por ejemplo, para unificar procesos, las empresas pueden seleccionar una plataforma escalable que permita implementar, compartir y gestionar la automatización en los distintos segmentos de la organización. Esta visión única garantizará que la nueva tecnología pueda ponerse en marcha y gestionarse fácilmente en todos los departamentos que la necesiten, maximizando al mismo tiempo la seguridad y el compliance.
Mantenerse a la vanguardia con la automatización
La automatización integral del TI de la empresa se está convirtiendo rápidamente en un elemento diferenciador. En la actualidad, el 16% de las grandes empresas españolas encuestadas ya han logrado la automatización integral del TI, mientras que muchas más se han embarcado en un proceso de automatización.
La mejor forma de adoptar la automatización es dando pequeños pasos, con el objetivo de trabajar hacia una estrategia integral más amplia. Un buen punto de partida es tener en cuenta las barreras que dificultan la automatización de las personas, los procesos y la tecnología. De este modo, las empresas estarán mejor situadas para hacer frente al difícil panorama actual y seguir impulsando su crecimiento.
