Dicen que cuando el río suena, agua lleva. Y el interés de Telefónica por hacerse con Iusacel, el tercer operador de México, cada vez se oye más cerca. Por el momento, la multinacional española se ha limitado a afirmar ante la CNMC que se encuentra en conversaciones o, mejor dicho, que existe un “proceso de negociación” abierto en el país centroamericano aunque no ha mencionado a la empresa en cuestión. Responde así a la información adelantada por El Confidencial esta madrugada.
La valoración de Iusacell ronda los 3.000 millones de euros, incluida la deuda, y su fusión permitiría a Telefónica sumar siete millones de clientes.
La operadora mexicana es propiedad al 50% de Televisa y de TV Azteca, de la familia Azcárraga y del conglomerado de la familia Salinas.
Las relaciones entre ambas compañías son nuevas. En 2012 firmaron una alianza estratégica para ofrecer la red más grande y rápida de México.