A pesar de que la principal motivación profesional de los millennials que trabajan en el sector tecnológico es el salario (seguida del reconocimiento, la responsabilidad y las opciones de crecimiento), más del 60% de ellos renunciaría a 250€ mensuales (3.000€ anuales) por un horario y jornada laboral que les permita conciliar y organizarse su tiempo de forma más autónoma, sin ataduras y lejos de las inflexibles estructuras corporativas de algunas compañías. El 62% de los millennials muestra, además, preferencia por el horario norte-europeo/americano (con pausa corta para comer) y la práctica totalidad de ellos da mucha importancia al espacio de trabajo.
Así lo reflejan los resultados de Millennials in Tech, el primer estudio en España sobre las preferencias laborales de los profesionales millennials del sector tecnológico, impulsado por ForceManager, la scale-up tecnológica que ha creado el asistente personal de ventas impulsado por Inteligencia Artificial (IA) líder en Europa. El estudio, en el que han participado 300 profesionales de entre 22 y 37 años con trabajos en la industria tecnológica, tiene como objetivo revelar las principales motivaciones laborales de este perfil de talento, y cómo las start-ups y scale-ups nacidas en España pueden hacer frente a las grandes compañías tecnológicas internacionales para atraer y fidelizar al mejor talento.
El employer branding es otra de las claves para que los nuevos actores del sector tech puedan competir con ‘las grandes’ por el mejor talento: los millennials buscan, en general, alinear sus valores con los de la empresa para la que trabajan y tienen más en cuenta que nunca la reputación de cada marca: buscan opiniones de empleados en Internet y más de un tercio de los encuestados escogería una empresa que se implique en causas solidarias o de RSC. Para competir por este talento, las marcas deben saber vender su historia y ser responsables y transparentes.
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Talento millennial, talento emprendedor
Más del 80% de los encuestados ya ha trabajado en una start-up o le gustaría tener esta experiencia, por lo que los entornos flexibles, altamente creativos y con proyectos potencialmente grandes, con los que tener un sentimiento de pertenencia, cuentan con una ventaja competitiva a la hora de atraer al mejor talento. El estudio refleja que los millennials en tech tienen espíritu emprendedor: más del 57% tiene ideas para empezar un proyecto propio y/o propone ideas de mejora y crecimiento en su empresa actual. Además, el 22% ya tiene sus proyectos personales en marcha.
La tecnología es importante para el día a día
Millennials in Tech arroja también ideas relevantes en cuanto a la digitalización de los entornos laborales. Los millennials son nativos digitales y están muy acostumbrados a utilizar sus smartphones personales en trabajo para chequear emails y comunicarse con sus compañeros, además de utilizar apps de productividad. Así, algo determinante para estos profesionales es que la empresa proporcione herramientas de tecnología modernas: para el 45%, la digitalización y la conectividad ayudarán tanto a mejorar la productividad como a implantar la tendencia de horarios flexibles, también preferida por ellos. Preguntados por lo que valoran más de un empleador, la mayoría prefiere trabajar con la última tecnología antes que tener una oficina con un diseño agradable, muebles modernos y comida gratis.
Las nuevas tecnologías de vanguardia están también en el radar de los millennials en cuanto a entornos de trabajo: el 40% de los encuestados afirma que la implantación de la Inteligencia Artificial y los asistentes de voz en las mecánicas empresariales optimizarán cargas de trabajo y productividad. El 59% de ellos, además, formaría parte de un programa de digital nomads que pusiera en marcha su empresa, cambiando el entorno laboral de oficina por trabajo en remoto o en movilidad gracias al uso de nuevas tecnologías.
Evolución generacional en el talento y emprendimiento
Del estudio Millennials in Tech se extraen, además, algunos datos curiosos sobre la evolución demográfica de las preferencias de este tipo de talento tecnológico: a medida que aumenta la edad de los profesionales, se observan diferencias en sus preferencias laborales. Los más jóvenes (22-27 años) prefieren las multinacionales y la seguridad de un entorno formativo competitivo; entre los 28 y los 32 años, buscan la adrenalina de una start-up y un proyecto que les apasione y les permita crecer y evolucionar profesionalmente; y entre los 33 y los 37 años, las preferencias vuelven a oscilar hacia la aparente estabilidad de una multinacional.
