OpenAI lanza el desafío a Google: según los rumores, la empresa dirigida por el CEO Sam Altman está trabajando para lanzar un motor de búsqueda basado en ChatGPT. El servicio respondería al dominio https://search.chatgpt.com.
“Nadie ha sido capaz de combinar modelos lingüísticos extensos con la investigación. A mí me encantaría hacerlo”, dijo Sam Altman el mes pasado en una entrevista. “Google muestra 13 anuncios en cada búsqueda, tal vez haya una forma mejor de ayudar a las personas a encontrar información”.
Google lleva casi 30 años dominando el mercado, con una cuota del 90%, y paga miles de millones de dólares a Apple cada año para que siga siendo la opción de búsqueda por defecto, incluso en los iPhones. Pero la propia Apple, revela Bloomberg, está intensificando las negociaciones con OpenAI para una posible integración de ChatGPT en las búsquedas. El impulsor de la medida es Microsoft, que ha financiado masivamente a la empresa dirigida por Sam Altman y ha empezado a integrar la IA en su motor de búsqueda Bing.
Google lleva casi 30 años dominando el mercado, con una cuota del 90%, y paga miles de millones de dólares a Apple cada año para que siga siendo la opción de búsqueda por defecto, incluso en los iPhones
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Altman invierte en la startup israelí de IA Apex Security
Mientras tanto, la empresa emergente de seguridad de inteligencia artificial, Apex Security, ha anunciado la finalización de una ronda de financiación inicial de 7 millones de dólares, parte de la cual está representada por una inversión directa de Sam Altman. La ronda fue codirigida por las firmas de capital riesgo Sequoia Capital e Index Ventures.
Fundada en 2023 por los veteranos del sector Matan Derman y Tomer Avni, Apex ya presta servicios a varios clientes de la lista Fortune 500 y tiene la intención de aprovechar la financiación inicial para acelerar el desarrollo de productos, ampliar su equipo y reforzar su presencia en el mercado. El surgimiento de la empresa israelí coincide con un aumento mundial en la adopción de capacidades de IA Generativa.
Derechos de autor: ocho periódicos utilizan OpenAI y Microsoft
Mientras tanto, en el ámbito de los derechos de autor, se abre el telón para iniciar una nueva acción legal. Ocho periódicos estadounidenses propiedad del gigante de inversiones Alden Global Capital (New York Daily News, Chicago Tribune, Orlando Sentinel, South Florida Sun Sentinel, San Jose Mercury News, Denver Post, The Orange County Register y The Pioneer Press) han demandado a OpenAI y Microsoft por infracción de derechos de autor. La demanda se presentó en el distrito sur de Nueva York, el mismo que utilizó el New York Times, hace cuatro meses, en su acción legal contra los gigantes de la IA.
La acusación se centra en el robo de “millones de artículos con derechos de autor de editores, sin autorización y sin pago”, para impulsar la comercialización de sus dos principales productos de IA Generativa: ChatGPT de OpenAI y Copilot de Microsoft. OpenAI y Microsoft también habrían eliminado los nombres y títulos de los periodistas de sus trabajos cuando su información aparecía en las respuestas a las preguntas. Además, la IA también habría inventado las respuestas, atribuyéndolas a los periódicos.
Acuerdo entre OpenAI y Financial Times para mejorar ChatGPT
Mientras tanto, OpenAI y el Financial Times se están asociando para mejorar ChatGPT con contenido atribuido. Con este acuerdo, OpenAI, -que ya ha firmado acuerdos en los últimos tiempos con Le Monde y Prisma Media-, entre otros, entrenará sus sistemas de inteligencia artificial y desarrollará nuevos productos y funcionalidades de IA para los lectores del periódico financiero británico. Los usuarios “podrán ver resúmenes atribuidos, citas y enlaces detallados sobre el periodismo de Financial Times en respuesta a preguntas relevantes”.
Nuestra asociación con Financial Times enriquecerán la experiencia de ChatGPT con un periodismo de primera clase en tiempo real para millones de personas en todo el mundo
Brad Lightcap, director de operaciones de OpenAI
“Se trata de un acuerdo importante en varios aspectos”, comenta John Ridding, director ejecutivo de Financial Times Group. “Reconocerá el valor de nuestro galardonado periodismo y nos proporcionará la primera información sobre cómo se crea el contenido a través de la inteligencia artificial”. Esta asociación, añade, “nos ayudará a mantenernos a la vanguardia de los avances en la forma en que las personas acceden a la información y la utilizan”.
“Nuestra asociación y nuestro diálogo continuo con Financial Times”, subraya Brad Lightcap, director de operaciones de OpenAI, “enriquecerán la experiencia de ChatGPT con un periodismo de primera clase en tiempo real para millones de personas en todo el mundo”.
Las seis áreas de aplicación más relevantes de ChatGPT
¿Cuáles son los posibles casos de aplicación de los nuevos chatbots basados en la IA, como ChatGPT? En dos estudios recientes publicados en revistas de Elsevier, empresa global de análisis de información, investigadores de la Universidad de Pisa analizaron cuantitativamente las tareas que los usuarios requieren de los grandes modelos lingüísticos generativos (LLM) e identificaron seis áreas en las que la aplicación de estos innovadores chatbots podría ser particularmente decisiva: recursos humanos, programación de software, ofimática, redes sociales, motores de búsqueda y educación.
Mediante el desarrollo y la aplicación de técnicas de procesamiento del lenguaje natural, podemos analizar datos textuales de diferentes tipos, como artículos científicos, patentes y contenido generado por los usuarios
Filippo Chiarello, investigador de la Escuela de Ingeniería y nuevo subdirector de Enseñanza y Centro de Aprendizaje de la Universidad de Pisa
Los resultados de estos estudios se han publicado en Technovation and Technological Forecasting and Social Change. Los autores del estudio forman parte del grupo de investigación Business Engineering for Data Science (B4DS): “Mediante el desarrollo y la aplicación de técnicas de procesamiento del lenguaje natural (PNL), podemos analizar datos textuales de diferentes tipos, como artículos científicos, patentes y contenido generado por los usuarios (por ejemplo, publicaciones de las redes sociales), descripciones de cursos, etc.”, explica Filippo Chiarello, investigador de la Escuela de Ingeniería y nuevo subdirector de Enseñanza y Centro de Aprendizaje de la Universidad de Pisa. “Nuestro objetivo es extraer información para apoyar el diseño educativo y otros procesos de toma de decisiones”.
Recursos humanos, software y ofimática
Del análisis de los datos se desprende que, en los ámbitos de los recursos humanos, para cuestiones como la programación de software o la automatización, ChatGPT y similares pueden apoyar el trabajo de los profesionales, especialmente estas tareas más mecánicas y que, por lo general, requieren una inversión de tiempo significativa. Por ejemplo, los usuarios suelen solicitar resumir documentos textuales o buscar información sobre el dominio.
Redes sociales
Para el área de las redes sociales, la IA Generativa puede ayudar con las tareas de creación de contenido, como escribir tweets y generar imágenes automáticamente. Por un lado, esto promete nuevos escenarios para mejorar la creatividad humana y, por otro lado, también abre escenarios preocupantes, debido a la difusión de contenido falso y a la posible amenaza a la originalidad de los escritores y diseñadores.
Motores de búsqueda
Otro ámbito que ha surgido es el de los motores de búsqueda. A partir de los datos surgen numerosos comentarios relacionados con el hecho de que las distintas búsquedas de Google, Microsoft Bing, etc. podrían ser sustituidas por nuevos chatbots basados en la IA generativa.
Habilidades
Además, se ha medido el impacto que estas herramientas tienen en las habilidades. Las áreas se refieren a las áreas de comunicación, colaboración y creatividad, trabajo con ordenadores, asistencia y redes sociales. Con este panorama, no cabe duda de que el mundo de la educación se verá influido por estas nuevas tecnologías, tanto de forma positiva (ChatGPT puede utilizarse para apoyar la labor de los educadores en la búsqueda de información, desarrollar clases y material didáctico, corregir los deberes, etc.) como de forma negativa (podría utilizarse para realizar tareas en lugar de los estudiantes y facilitar los fenómenos del plagio).