De acuerdo con los datos, si en 2008 más del 60 por ciento de los profesionales se mostraba a gusto con su puesto, este año la situación es muy diferente, puesto que el índice de satisfacción ha bajado del 3,6 al 3,3 en una escala sobre 5. Este hecho es un reflejo de que “en la situación económica presente, el clima laboral se hace más hostil e inestable. Sin que sepamos con seguridad el motivo, pensamos que esto refleja la desazón de los profesionales ante los despidos de sus compañeros y su desmotivación por tener que soportar una mayor carga de trabajo”, opina Cristina Villanova, directora de Marketing de Catenon en España.
A cambio, ha aumentado de manera exponencial el número de trabajadores dispuestos a irse al extranjero con un menor nivel de exigencia en términos retributivos que en años anteriores, puesto que se duplica con respecto a 2008 el porcentaje de trabajadores dispuestos a irse por un periodo superior a tres años (del 17 al 33 por ciento), subiendo también en un 50 por ciento el porcentaje de encuestados que se irían con un sueldo igual o inferior al que perciben en España. Paralelamente, se reduce a la mitad (del 36 al 18 por ciento) el porcentaje de personas que exigirían duplicar su sueldo para irse al extranjero.
En cuanto al destino preferido para buscar nuevas oportunidades laborales, Europa pierde por primera vez fuerza respecto a América, no obstante, el viejo continente se mantiene como primera opción (un 53 por ciento lo elegiría para expatriarse), si bien pierde 11 puntos respecto del estudio de 2008. Así, “la confianza en las economías tradicionales ha bajado; por ello, muchos españoles creen que buscar oportunidades en países más lejanos es una buena opción. También se deduce que la confianza en Estados Unidos ha subido, quizá gracias a la tendencia positiva que impulsa el presidente Barack Obama, y su plan de actuación contra la crisis”, añadió Villanova.