El gasto en consumibles de oficina se ha incrementado en miles de euros en los últimos años. Este incremento ha hecho que muchas pymes hayan tenido que acudir a estrategias más novedosas para reducir costes.
Uno de los causantes de este problema es el uso excesivo de la impresora es que provoca que los cartuchos de tinta/tóner se consumen en un abrir y cerrar de ojos. Por lo tanto, lo más recomendable es recurrir a técnicas más creativas de ahorro como Ecofont o alguna más tradicional, como el uso de cartuchos de tinta/tóner compatibles.
Como dicen ellos en su web, “las ideas más atractivas son simples: ¿Cuánta tinta se puede eliminar de una letra sin que esta pierda su legibilidad? Tras extensas pruebas con todo tipo de formas. Los mejores resultados se obtuvieron usando círculos pequeños. Después de largas horas (y café) se obtuvo una tipografía que gasta hasta 20% menos de tinta por impresión.”
La empresa holandesa Spranq es la autora de esta nueva tipografía, según afirman, permite reducir hasta un 25% la inversión en tinta. El secreto, como ocurre con el queso holandés, está en los agujeros: si ampliamos el zoom para ver la tipografía de cerca, veremos que el cuerpo de las letras está lleno de pequeños círculos blancos; ésa es la tinta que nos ahorraremos.
Sin embargo, el uso de esta tipografía no es la única forma de disminuir el consumo de tinta, existen trucos que te ayudarán a ahorrar tinta y dinero:
- Imprime en escala de grises, modo rápido o borrador: El modo borrador o escala de grises son algunos de los ajustes más interesantes de las impresoras modernas a la hora de imprimir documentos sin malgastar la tinta. Además, optar por estas configuraciones rápidas te permitirá disminuir la calidad de impresión para ganar velocidad y obtener un mayor rendimiento de los cartuchos de tinta o tóner, sin afectar la legibilidad del documento. Es una buen alternativa para imprimir documentos de texto en donde el color no sea imprescindible.
- Cambia el tipo o tamaño de las fuentes: Parece una tontería, pero no lo es. Elegir cuidadosamente el tipo de letra de nuestros trabajos supone un ahorro promedio del 30% (unos cuantos miles de euros al año). Tipografías finas y estilizadas como la Garamond requieren de menos tinta que si utilizamos fuentes más gruesas. Además, si hablamos de ahorrar tinta, actualmente existen fuentes tipográficas especialmente diseñadas para el ahorro de tinta como la Ryman Eco o el programa EcoFont que tiene pequeños agujeros en los caracteres con el objetivo de utilizar menos tinta en su impresión.
- Imprime sólo lo que te interesa o áreas seleccionadas: La mejor manera de gastar poca tinta es preguntarnos si lo que vamos a imprimir es totalmente necesario. Es decir, muchas veces cuando se manda a imprimir desde página web o email el documento viene cargado de anuncios, banners, barras de navegación y demás publicidad o propaganda propia del sitio web que supone un gran desperdicio de tinta y papel. Para ahorrarnos los gastos Google Chrome cuenta con una herramienta gratuita llamada CleanPrint que se pueden instalar como extensión del navegador; esta te permite seleccionar el texto que deseas incluir en la impresión y excluir el resto.
- Prueba utilizar cartuchos compatibles o recargables: Si el uso de la impresora es realmente intenso y los cartuchos de tinta/tóner se consumen en un abrir y cerrar de ojos, lo más recomendables es recurrir a los cartuchos de tinta/tóner compatibles. Estos cartuchos son tan fiables como los originales y cuestan mucho menos.
- No reemplaces los cartuchos tan rápido: Aprovecha el cartucho hasta el final. Muchas veces las impresoras lanzan las alertas de “nivel de tinta bajo”, pero esto no significa que tengamos que salir corriendo a comprar otro cartucho de tinta/tóner, al cartucho le queda entre un 20% – 30% de tinta.
