En los últimos tiempos, la ciberseguridad se ha convertido en la gran preocupación de las organizaciones. 2020 ya suscitaba antes de nacer serios recelos por parte de las compañías de seguridad TI que proclamaban a los cuatro vientos que nos acechan -multiplicadas- constantes amenazas como el ransomware, el phishing, filtraciones de datos… a las que hay que añadir ataques inteligentes a nuestras infraestructuras críticas y asaltos permanentes a la nube. Y la industria se está rearmando a la caza de empresas especializadas con las que apuntalar su oferta. Prueba de ello es que en los tres meses que va de año se han cerrado varias operaciones de compra de compañías significativas en este ámbito.
A nivel internacional, Dell Technologies se desprendió de su división de seguridad, RSA, por un monto de 2.075 millones de dólares, que ha pasado a manos de la firma de capital privado Symphony Technology Group (STG). Bloomberg ya había publicado hace un año la intención de Dell de quitarse lastre y que buscaba un comprador comprometido con la tarea de RSA y con su cartera de clientes. Ha sido precisamente una firma de inversión la que ha olido negocio y no ha dudado en desembolsar una cantidad respetable, muy próxima a los 2.100 millones que Dell pagó por ella en 2006, casi el doble de lo que esperaba conseguir la firma, según los analistas. Accenture ha acordado adquirir los servicios de ciberseguridad de Symantec a Broadcom, sin que hayan transcendido las condiciones financieras. (Esta misma semana Accenture anunciaba una nueva compra)
La cartera de servicios de ciberseguridad de Symantec incluye la monitorización y análisis global de amenazas a través de una red de centros de operaciones de seguridad, servicios en tiempo real de conocimiento de los ‘adversarios’ e inteligencia específica del propio sector, y servicios de respuesta ante incidentes. Cuenta asimismo con seis centros de operaciones de seguridad, que se encuentran en EEUU, Reino Unido, India, Australia, Singapur y Japón.
Una empresa prometedora en el campo del CASB y la seguridad en la nube es Netskope, que se muestra golosa para la inversión. Y es que la firma acaba de cerrar una nueva ronda de financiación por valor de 340 millones de dólares liderada por un nuevo inversor, Sequoia Capital Global Equities. Tras esta inyección de capital, Netskope alcanza un valor de casi 3.000 millones de dólares.
Adquisiciones en España
El mercado español está bullendo en el ámbito de la ciberseguridad, que alcanzará, según datos de IDC, un volumen de 1.381 millones de euros en 2020, un 6% más que un año antes. Indra madrugó el 8 de enero para hacerse con SIA, con el objetivo de liderar el mercado de la seguridad de la información en España y Portugal por volumen de negocio en servicios de valor añadido. SIA es una empresa con producto propio para la prestación de servicios y el desarrollo de soluciones avanzadas de ciberseguridad en Europa y el resto del mundo. Posee más de 10.000 proyectos de seguridad y está reconocida en soluciones de identidad y firma electrónica. “La nueva entidad estará apoyada en un equipo de más de 1.000 profesionales altamente cualificados y expertos en ciberseguridad, conformados en equipos especializados de consultoría en diferentes áreas, muy complementarios”, afirmó Cristina Ruiz, consejera directora general de TI de Indra.
Como si se tratase de un resorte, Ibermática adquiría el cien por cien de ITS Security
Como si se tratase de un resorte, Ibermática adquiría el cien por cien de ITS Security. Esta compañía, que hasta ahora formaba parte del grupo industrial Egile, facturó el pasado año seis millones de euros y cuenta con cuatro oficinas repartidas en distintos puntos de la geografía española.
El objetivo es que con esta operación el volumen de ingresos del área de seguridad se incremente hasta los 25 millones de euros en 2024. Ibermática ha informado de que ITS mantendrá su marca y sus SOC (Centros de Operaciones de Seguridad), y Álvaro Fraile continuará como director general. El nuevo portfolio de soluciones ayudará a fortalecer los servicios actuales de Ibermática no solo en seguridad informática sino también en entornos industriales, y cubrirá ámbitos como el endpoint y el servidor, el control del dato, las auditorías o la seguridad perimetral.
“Con esta compra aspiramos a convertirnos en proveedor TI de referencia también en el ámbito de la ciberseguridad, área que consolidamos aportando a los clientes un valor adicional y complementario, así como nuevo expertise”, ha comentado el CEO de Ibermática, Juan Ignacio Sanz.
A menor escala, Factum anunciaba la adquisición de Secura, consultora especialista en servicios y soluciones de ciberseguridad. Los directivos de Secura se integran en la dirección de Factum y se unifican los equipos para crear “uno de los referentes en servicios avanzados de ciberseguridad a nivel internacional”, aseguraba un comunicado.
La compañía inicia un nuevo camino marcado por un objetivo de facturación para 2020 superior a los 10 millones de euros que mantengan la rentabilidad de la empresa y la consolide para futuras adquisiciones; además de continuar con el desarrollo del negocio en México y Reino Unido, donde se abre una nueva posibilidad tras el brexit, según concluyen los propios directivos de Factum.
La ciberseguridad se asienta en las Islas Canarias
Ya a nivel regional, Alhambra IT Atlantis Technology (Binter), Inetel y Riskmedia han sellado una alianza estratégica con el objetivo de crear un proyecto de gran envergadura que permita securizar las empresas e instituciones de las Islas Canarias y, por extensión, del norte de África. Así ha nacido OneCyber. OneseQ, el área de ciberseguridad de Alhambra IT, se encargará de la cobertura y capacitación de seguridad gestionada. Atlantis Technology (Binter) aporta su experiencia dentro del sector TIC en Canarias y Cabo Verde, con más de 70 profesionales altamente cualificado; Inetel añade su valor como empresa local canaria TIC y Riskmedia ayudará como bróker de seguros internacional especializado en riesgos empresariales. En último término, Fibratel acaba de montar una unidad específica de ciberseguridad, denominada /fsafe. La puesta en marcha de esta nueva área de actividad va a centrarse en todos los aspectos relativos a la seguridad y a la respuesta ante amenazas de las infraestructuras tecnológicas de empresas y entidades.