Kyocera Mita cambia de nombre. A partir de ahora se llamará Kyocera Documents Solutions, aquí y en todo el mundo. Desaparece Mita, el nombre del fabricante de copiadoras con el que se fusionó hace décadas. Óscar Sánchez, director general de la compañía en España, recalca que no se trata de un mero cambio cosmético, sino que responde al giro dado por la compañía hace unos años, y que hoy hace que dependa menos del hardware, cuyas ventas han caído significativamente con la crisis, y sí más del software y los servicios. “La idea es consolidarse como un proveedor de soluciones digitales. Nuestros mensajes hasta ahora han estado muy centrados en el hierro. El ‘print copy, scan, fax’ que se ve en toda nuestra publicidad responde a un discurso antiguo”, asegura Sánchez.
Este esfuerzo por cambiar el modelo de negocio ante la depauperación de la venta de máquinas se ha traducido en iniciativas de pago por uso y de servicios gestionados que implican labores de preventa y posventa en los clientes. “El objetivo ha sido hacer auditorías de todo el flujo documental y diseñar propuestas para que los clientes ahorren en costes y tiempos. Además, luego vemos si la solución da el fruto esperado y hacemos los cambios necesarios para optimizarla”, explica.
Como resultado, hoy en día, Kyocera obtiene de la comercialización de impresoras y copiadoras el 38% de sus ingresos, mientras que otro 16% provienen del software y los servicios, y el resto, en realidad la parte del león de su negocio, de los consumibles.
El reto para Kyocera, según explica su responsable, es que este mensaje de los servicios cale en todo su canal(formado por 56 integradores y distribuidores), que es el que tiene que llevarlo a las compañías que más han dejado de invertir: las pymes. Sánchez adelanta que la filial cerrará el año fiscal 2012, concluido el 31 de marzo, con una facturación similar al precedente. Es decir, por encima de los 50 millones de euros, según la documentación a la que ha tenido acceso CHANNEL PARTNER. Sin embargo, para el año contable que ahora comienza, los objetivos de Kyocera en España son “muy ambiciosos”. “Exactamente, mi plan de negocio dice 63,2 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 22 o 23%”.
Este tirón llegará por el aporte de los servicios, pero también por la apertura de la oficina de Barcelona, que tuvo lugar hace un par de meses. En Cataluña el canal de Kyocera hace 10 millones de euros, pero el propósito es engrosar la facturación en esta comunidad en tres millones este año. “Nuestro canal catalán ha estado muy presente en las pymes, pero necesitábamos dotarles de herramientas para penetrar en la gran cuenta y la administración local. Por eso, para facilitar las cosas, hemos traducido todo el software y la documentación al catalán”. Las oficinas, donde trabajan ya siete personas, están en el moderno distrito 22@ y cuenta con salas de reuniones, formación y exposición.
Por otro lado, y para mejorar el servicio a las grandes cuentas, Kyocera ha creado el departamento Global Services, que funciona a nivel europeo y que atenderá a las primeras 500 cuentas del fabricante en el continente. Este departamento, al que reportarán dos personas desde la filial, tiene 27 clientes en España. “La idea es dar un servicio del alcance internacional a empresas que están en varios países y que así lo requieren”. Asimismo, Óscar Sánchez anuncia que su compañía ha ganado una operación valorada en 60 millones de euros con una empresa del Ibex, aunque, por motivos de confidencialidad, no pudo desvelar su nombre.
