R. Contreras (Londres)
Londres ha sido el marco elegido por Fujitsu Technology Solutions para el lanzamiento de la nueva generación de servidores blade Dynamic Cube, cuyo primer representante, el modelo Primergy BX900 plasma la nueva estrategia de la firma nipona que se sustenta en el crecimiento global de sus servidores basados en la plataforma x86.
“Se trata del primer lanzamiento global de la nueva marca que abre camino a un plan de largo plazo con el que queremos crecer en este mercado hasta alcanzar una cuota de mercado mundial del10 por ciento, llegando al medio millón de unidades vendidas”, señaló Jens-Peter Seik, responsable de la Unidad Global de Producto de Servidores x86 para el grupo Fujitsu.
Este anuncio viene a cubrir las expectativas de los responsables TI, “cuyas prioridades pasan por controlar los costes y justificar la inversión en tecnologías”, argumentó Thomas Meyer, vicepresidente de Sistemas y Soluciones de Infraestructuras de IDC.
La virtualización permite reducir costes y tanto los segmentos de servidores blade como los entornos de virtualización ofrecen índices de crecimiento muy altos. “Otro aspecto que viene a reforzar las ventajas de BX900 es que en el mercado de los servidores los costes operacionales crecen dramáticamente. El 78 por ciento de las grandes empresas se están moviendo a máquinas virtuales”, explicó el consultor de IDC.
Las empresas deben configurar lo que Meyer definió como la ‘rosa de los vientos’ de la virtualización que completa el círculo del centro de datos virtual: clientes, redes, servidores y almacenamiento.
Cuatro claves
Imbuida en esta problemática, la gama Dynamic Cube trata de cubrir cuatro líneas maestras con las que Fujitsu Technology Solutions quiere dotar a su oferta de todas las características de su filosofía de infraestructuras dinámicas, y en cuyo horizonte se encuentra las Infraestructuras como servicios, según especificó Seik. En primer lugar, se ha puesto en marcha un concepto dinámico de alimentación y refrigeración que reduce el consumo y los costes de energía. En segundo término ser posiciona una mejora tanto de las prestaciones como de las funcionalidades a través de la virtualización.
En este punto, Seik hizo hincapié en las grandes bondades de la virtualización que tiene en el ahorro de costes su principal argumento para las compañías, asegurando que Dynamic Cube ofrece a las compañías un ahorro en TCO (Total Coste de Operaciones) del 25 por ciento, frente a sus competidores.
Como se insistió repetidamente durante la presentación no se trata de un mero producto de hardware, que presenta exigentes ventajas de diseño compacto y la posibilidad de gestionar de forma única hasta cuatro unidades. El lanzamiento está arropado con la colaboración de distintos partners que han contribuido a enriquecer el producto. Intel aporta la arquitectura tecnológica con el nuevo Xeon 5500, Microsoft y VMware contribuyen a que se adapte como pez en el agua a cualquier entorno de virtualización, NetApp ofrece el almacenamiento unificado de forma dinámica y Brocade se suma con el switch 5040 fibra channel de 8 Gbps que simplifica la conectividad de las plataformas SAN. No obstante, Seik señaló que “el producto está diseñado para soportar los diferentes estándares operativos como pueda ser Xen”.
El tercer punto que abandera el lanzamiento es la alta disponibilidad dinámica que se sustenta en ofrecer una redundancia total y en la reducción del tiempo de caída y reinicio de los sistemas. El software gestiona los fallos del hardware y cualquiera de sus componentes puede ser sustituido en caliente.
El cuatro gran apartado es la escalabilidad dinámica, en la que ha tenido mucho que ver la participación de Intel. Así BX900 permite ofrecer dos o más blades en un chasis estándar de 10U hasta llegar a los 18 blades. “De esta forma ofrecemos un 12 por ciento de prestaciones mayores que el resto de fabricantes de servidores”, alardeó Jelle Vervaeke, responsable de Marketing de Producto.
