Más de 50 multinacionales de todos los sectores han sancionado al mercado ruso en los últimos días a raíz de la guerra iniciada por Putin contra Ucrania. Entre ellas, grandes compañías tecnológicas como Apple, Aphabet, -la matriz de Google–, Microsoft, Oracle, SAP, Spotify, Dell Technologies, Amazon, Accenture, Ericsson, Nokia y el fabricante de software empresarial Atlassian Corp han limitado el acceso de los medios rusos a sus plataformas y han restringido la venta de sus productos en el país. También la GSMA eliminó el pabellón ruso en la recién celebrada edición del Mobile World Congress (MWC) 2022 de Barcelona.
A pesar de que Apple ha anunciado que ha detenido todas las ventas de sus productos en Rusia, ha limitado servicios como los de la plataforma de pago Google Pay y ha eliminado las aplicaciones de Russia Today (RT) y Sputnik de la App Store, aunque no en Rusia; esta decisión ha sido, sobre todo, para mantener sus finanzas a salvo ante la pérdida de fuerza del rublo, el cual se ha devaluado un 30%.
No obstante, desde el grupo de la manzana han declarado estar “profundamente preocupados por la invasión rusa de Ucrania” y que apoyan “a todas las personas que sufren como resultado de la violencia”, y han deshabilitado tanto el tráfico como los incidentes en vivo en Apple Maps en Ucrania como medida de seguridad y precaución para los ciudadanos ucranianos.
Accenture cierra su negocio en Rusia con 2.300 empleados a los que dará “apoyo”
No es la primera vez que Apple toma esta decisión. Hace siete años el rublo también cayó en torno a un 20% cuando Rusia apoyó a los separatistas ucranianos, por lo que Apple también interrumpió sus ventas en Rusia.
La consultora Accenture ha sido otra de las que ha cerrado su negocio en Rusia. En un comunicado, la compañía ha dicho que emplea a 2.300 personas en Rusia, a las que agradeció su “dedicación y servicio” en los últimos años asegurando que les dará “apoyo”.
Según el diario Financial Times, otra conocida consultora estadounidense, McKinsey, -con 400 empleados en Rusia-, se ha sumado a las sanciones a Moscú cesando sus operaciones con las entidades estatales rusas y afirmando que suspenderá los negocios con sus clientes en ese país una vez terminen sus proyectos.
Otras plataformas de streaming como Spotify y Netflix también han tomado acciones. La primera, cerrando su oficina en Rusia de forma indefinida y la segunda, deteniendo la producción y adquisición de cuatro proyectos rusos, según han informado los medios Deadline y Variety. Es más, Netflix también ha paralizado sus producciones en China, un país que no ha condenado todavía el ataque.
Por su parte, la red social Snapchat ha dejado de publicar anuncios en Rusia, Bielorrusia y Ucrania, detendrá la venta de anuncios en Rusia y Bielorrusia y ha prometido enviar 15 millones de dólares a organizaciones que ayudan a los ciudadanos de Ucrania.