En 2016, se verá cómo los productos y soluciones responden a las necesidades que tiene el mercado en materia de sencillez, una gestión más fácil, una mejor rentabilidad y la necesidad de integrar la gestión de datos en el cloud híbrido.
Desde DevOps al flash y al futuro de la administración del almacenamiento, Lee Caswell, Vicepresidente de Marketing de Productos, Soluciones y Servicios en NetApp ha destacado las novedades que traerá el Año Nuevo.
La infraestructura convergente minimizará la pesada tarea que supone integrar hardware y liberará a los clientes para que puedan experimentar con software innovador. Ha sido diseñada para aumentar la capacidad de respuesta del departamento de tecnología ante las necesidades del negocio, a la vez que se reduce el coste general en informática.
Al igual que con la mayoría de tecnologías, el camino hacia la infraestructura convergente se ve impulsado por la necesidad de sencillez y velocidad y por la reducción de gastos.
Además de la sencillez y la velocidad, la infraestructura convergente es uno de los segmentos con mayor crecimiento de la infraestructura empresarial pues resuelve el principal problema de la mayoría de organizaciones: la falta de conocimientos de tecnología.
En 2016, las organizaciones verán un aumento de las inversiones en infraestructura convergente conforme DevOps emerja como ejemplo clave de impulso del crecimiento.
Aunque DevOps requiera más tiempo para programar aplicaciones, puede automatizar y optimizar muchos procesos, como la configuración de hardware. Esta transición de flujos de trabajo puede ayudar a los equipos de tecnología a redirigir la atención de su personal hacia las tareas que ayuden a conseguir y promover objetivos de negocio.
La primera oleada de adopciones de flash estuvo impulsada por su promesa de rendimiento, pero su uso fue escaso debido a los altos costes. Hasta ahora, el flash estaba reservado a tecnologías por niveles y caché o se aplicaba puntualmente en aplicaciones de rendimiento aisladas como las bases de datos.
En 2016, el sector seguirá adentrándose en una revolución flash como resultado de la bajada de precios. Las ventas de flash están listas para duplicarse debido al agresivo recorte en los precios provocado por la apuesta de las grandes compañías de almacenamiento empresarial por este jugoso trozo de mercado.
Al descender los precios, las empresas pronto empezarán a encontrar nuevos usos al flash para impulsar sus negocios. Mansfield Oil, líder en suministro energético, logística y servicios en Norteamérica, es una de las compañías privadas con mayores ingresos de Estados Unidos. La empresa utiliza flash para mantener el sólido rendimiento de su entorno de servidor SQL de alta transacción. Esto permite a Mansfield ir por delante de la competencia y garantizar que las aplicaciones empresariales fundamentales estén siempre disponibles, sin excepción.
El papel de los administradores de almacenamiento seguirá evolucionando en respuesta a los entornos tecnológicos en continua transformación. A medida que las organizaciones evolucionan hacia un modelo de prestación cloud para reducir costes y aumentar la flexibilidad, cambian de ser creadores y operadores de sus propios centros de datos a ser agentes de servicios que abarcan tanto recursos de cloud público como privado.
En 2016, el administrador de almacenamiento clásico evolucionará hacia un administrador de datos del cloud híbrido con un puesto en la mesa ejecutiva o se relegará a los detalles de un cómodo producto de almacenamiento y será cada vez menos relevante.
Los problemas de seguridad y los requisitos de soberanía de los datos están empujando a los departamentos de tecnología a mirar con más detalle sus planes respecto al cloud. Los administradores necesitan saber exactamente dónde residen sus datos y quién los gestiona en todo momento.
Empresas como DARZ colaboran con NetApp para proporcionar a las empresas protección de datos fiable, elasticidad para cumplir sus exigencias y la libertad y flexibilidad que surge al combinar con seguridad coubicación, un cloud privado y clouds públicos de hiperescala en una solución fluida. Al poder cambiar con seguridad entre proveedores de cloud en solo segundos sin migrar datos, las empresas se benefician de inmediato al emplear menos tiempo en tecnología y más tiempo en centrarse en la innovación sin sacrificar seguridad o control.
