A pesar de que Sopra Steria ha trabajado con el sector bancario desde los inicios de la compañía, no ha sido hasta el año 2012 que decidió crear una unidad de negocio específica para la innovación y digitalización de este sector: Sopra Banking Software (SBS). Roberto Dubón, el CEO de SBS en Iberia, nos cuenta cómo ha evolucionado la compañía y el sector de la banca en estos años.
¿Qué es Sopra Banking Software?
R. D.: Sopra Banking Software (SBS) es una filial del Grupo Sopra Steria, consultoría europea que ofrece servicios digitales y de desarrollo de software. Nuestra misión es la construcción y distribución de productos de software para el sector financiero, con el objetivo de ayudar a nuestros clientes a impulsar su transformación digital a través de soluciones tecnológicas propias y lograr que sean más competitivos y obtengan beneficios tangibles y sostenibles. Somos partner tecnológico de más de 1.500 instituciones financieras en todo el mundo.
¿Cuándo se creó SBS?
R. D.: Sopra Steria fue creada en 1968 en Francia y entró en España en el año 2000, a través de la adquisición de diferentes compañías de integración de sistemas y gestión de infraestructuras y servicios. En 2012 nació Sopra Banking Software como tal, pero la construcción e integración de cores bancarios ha formado parte de la historia de la compañía desde sus inicios.
Desde su fecha de constitución, SBS ha ido creciendo con la adquisición de diferentes empresas y soluciones, tales como COR&FJA Banking Solutions, Delta, SAB, Cassiopae, Apak, etc., las cuales nos proporcionan una presencia en los cinco continentes y un liderazgo en las zonas de Europa y EMEA.
¿Qué soluciones ofrece SBS?
R. D.: En SBS contamos con distintas soluciones que permiten industrializar todas las áreas de un banco. Desde un core bancario construido sobre Sopra Banking Platform, nuestra plataforma cloud modular que puede ser utilizada tanto en su versión completa como implementada en un vertical de negocio, o por módulos que cubren una función específica -por ejemplo, los pagos, créditos, etc.-; hasta soluciones para procesos digitales enfocadas en la interoperabilidad, tales como el open banking o el estándar de pagos europeos Request to Pay; pasando por soluciones para canales digitales, como el daily banking y el onboarding. También tenemos una solución de reporting financiero y de riesgos en modo SaaS para los mercados europeo y español.
Además, como parte del Grupo Sopra Steria, podemos dar un apoyo end to end a nuestros clientes, es decir, colaborar con ellos desde la definición de nuevos procesos de negocio, hasta su prototipado, el desarrollo de aplicaciones y la administración de estos sistemas una vez están en producción.
¿De qué manera ayuda SBS al desarrollo de la banca digital?
R. D.: Ponemos a disposición de nuestros clientes una gama completa de servicios y productos, así como el talento tecnológico y sectorial de nuestros profesionales, lo que nos permite llevar a cabo proyectos enfocados en áreas específicas de acción y brindar asistencia integral a lo largo de toda la cadena de valor de las entidades financieras.
Nuestras soluciones pueden ser adaptadas y utilizadas on premise por nuestros clientes, así como consumidas en modo SaaS, proporcionando una reducción de costes y plazos significativa a la alternativa más tradicional del desarrollo propio, que en muchos casos supone una barrera para la adaptación a la flexibilidad y velocidad exigidas por el negocio.
Otra de nuestras principales características es la utilización de un amplio marketplace, que posibilita la creación de completos y customizados casos de uso sin necesidad de construir complejas interconexiones con múltiples proveedores, simplificando los pasos en los aspectos técnicos, de seguridad, de compliance o legales.
Muchos de nuestros clientes de la industria financiera nos preguntan cómo podemos ayudarles a llevar a cabo iniciativas de digitalización relacionadas con la sostenibilidad
¿Cómo ha evolucionado este sector en los últimos años?
R. D.: Según el informe Digital Banking Experience 2022 (DBX) elaborado por SBS, este último año ha habido un cierto retroceso en cómo se perciben los bancos a sí mismos en su camino hacia la digitalización de sus productos y servicios. Casi la mitad de estas entidades, en concreto, un 49%, se encuentran en la categoría más baja, los llamados exploradores, en comparación con el 37% que se declaraba en este estado en 2021.
Al igual que en el año anterior, los bancos se enfrentan a un cambio creciente y consolidan su transformación digital en un entorno macroeconómico presionado. En 2022, sin embargo, el estudio destaca los obstáculos que dificultan su madurez digital y la menor confianza de los bancos en su capacidad para afrontar el futuro. Entre los principales retos identificados para 2023 están la capacidad de colaborar con su ecosistema, la agilidad en sus procesos y el mantenimiento del equilibrio entre la resiliencia operativa y la capacidad de innovación.
¿Qué es el green banking y de qué manera ayuda a la sostenibilidad?
R. D.: El green banking tiene que ver con el fomento de la concienciación sobre la sostenibilidad y el impacto de nuestras operaciones sobre el medio ambiente, así como con las oportunidades de inversión a través de entidades financieras en proyectos relacionados con las energías renovables y la lucha contra el cambio climático.
Se trata de una cuestión que gana cada vez más relevancia entre los clientes de los bancos. Un 25% de los usuarios de banca afirma que la lucha contra el calentamiento global es una cuestión clave. Además, el 55% de ellos señala que es incluso más importante que la rentabilidad de las inversiones. Del mismo modo, cada vez más entidades apuestan por invertir en proyectos verdes que permitan que las energías renovables sean una fuente principal de energía en todo el mundo.
¿Cree que el green banking está teniendo una implementación real?
R. D.: El 63% de los bancos dice que el medio ambiente es una prioridad en su agenda, considerando el compromiso contra el calentamiento global como algo esencial para elegir sus inversiones. De hecho, cada año aumenta el peso de este factor en la toma de decisiones y los bancos prefieren impulsar e invertir en acciones que potencien las iniciativas, empresas y sectores verdes. Muchos de nuestros clientes de la industria financiera nos preguntan cómo podemos ayudarles a llevar a cabo iniciativas de digitalización relacionadas con la sostenibilidad.
¿Cuáles son sus próximos proyectos?
R. D.: Por motivos de confidencialidad es complicado hablar de proyectos específicos. Actualmente trabajamos con las principales entidades bancarias de España en proyectos de digitalización y ayudamos con nuestras soluciones a la industrialización de cada una de sus áreas.
De forma genérica, destacaría el lanzamiento en el país de nuestra plataforma para Request to Pay (RtP), que ofrece la interoperatividad y la administración de los procesos y datos exigidos por la nueva normativa europea y, además, acelera la creación de casos de uso. El potencial del RtP es enorme, tanto para la banca como para los múltiples ecosistemas financieros que pueden crearse con otros sectores y donde los bancos deben posicionarse estratégicamente.
¿Qué tecnologías se están implementando más?
R. D.: El informe DXB 2022 destaca la hiperpersonalización, la banca verde, la ciberseguridad y los métodos de pago digitales como las tendencias más destacadas del sector.
Por otro lado, entre los mayores retos se encuentran la interoperabilidad de los sistemas y datos internos y externos, así como los requisitos de seguridad. Por ejemplo, dos tercios de los bancos afirman haber realizado inversiones en el ámbito del open banking, pero solo el 19% dice estar preparado para las finanzas abiertas. En este sentido, una de las principales tendencias para los próximos años será continuar trabajando para desarrollar estrategias centradas en la construcción de una mentalidad de colaboración y en la necesidad de establecer, invertir y alimentar los ecosistemas.
¿Qué porcentaje de inversión dedican a la innovación?
R. D.: La mayoría de los bancos pequeños y medianos han disminuido su inversión en innovaciones de servicio y de pagos, prefiriendo en cambio priorizar acciones a corto plazo, como proteger sus sistemas de TI y mejorar su productividad y eficiencia.
Por su parte, la categoría de banco más avanzado en términos de madurez digital, los llamados pioneros, también ha invertido una mayor cantidad de recursos en el crecimiento de las capacidades de su ecosistema. El 99% de los pioneros prevé un crecimiento de los ingresos como resultado de la adopción de modelos comerciales colaborativos.
Principales conclusiones del Informe Digital Banking Experience 2022
En el informe observamos sensibles diferencias entre los grandes bancos y los pequeños y medianos actores. Sin duda, estos últimos, aunque avanzan, encuentran mayores dificultades para realizar fuertes inversiones en innovación en servicios y pagos y en incrementar sus relaciones con terceros para crear sinergias, y que todo ello genere un retorno a medio o largo plazo. No olvidemos que estamos en un contexto geopolítico-económico muy complejo y que la competencia en servicios y productos digitales no solo es sectorial, sino también de los gigantes tecnológicos, que siguen de modo imparable su conquista en el mundo de los pagos y de los servicios.
No se trata de que los bancos se estén quedando atrás, pues tradicionalmente han estado a la vanguardia de la transformación digital, lo que sigue ocurriendo. El informe lo que refleja es su autoevaluación, es decir, cómo se perciben a ellos mismos para afrontar las nuevas necesidades que surgen, como las tendencias colaborativas del Open Finance o de los marketplaces.
Así pues, no creo que se esté dando un estancamiento del progreso por parte de los bancos.