España es el séptimo país europeo con la mayor mayor adopción digital a lo largo del año, y a pesar del decrecimiento de cuatro puntos de media con respecto a 2021. Esta es una de las principales conclusiones del informe de McKinsey, según el cual las telecomunicaciones, banca y entretenimiento son los sectores con mayor nivel de interacción digital. Asimismo, el móvil se ha posicionado como la principal rampa de acceso a la adopción digital, siendo el dispositivo preferido para el 49% de los usuarios españoles, frente al 40% de los consumidores que prefieren el ordenador. Por otro lado, los niveles de satisfacción y confianza han disminuido un 4% y un 1,5% respectivamente, con respecto al 2021, a causa de la mala experiencia del usuario, el riesgo de sufrir ciberataques o errores de reembolso
A pesar de que, coincidiendo con el fin de las restricciones de la pandemia, la adopción digital en España ha retrocedido ligeramente con respecto al pasado año, el estudio demuestra que los hábitos digitales a nivel nacional continúan siendo elevados y que Internet es el canal preferido de los consumidores españoles para usar servicios, consumir y comprar productos de diferentes sectores. Tanto es así que, según el informe, el 73% de las interacciones de los consumidores en España se hace de manera digital, y el 55% sin necesidad de asistencia humana, frente al 58% en el resto de Europa.
Los españoles estiman que la inteligencia artificial, la hiperpersonalización y el metaverso tendrán un impacto positivo en las futuras interacciones digitales
Nuevas tendencias e impacto de la situación actual
Los constantes avances en materia de digitalización se han posicionado como una de las principales estrategias por las que cada vez más compañías están apostando en la relación con sus usuarios. En este sentido, el significativo aumento de inversión en TI en Europa, un 25% desde 2019, así como el cambio de hábitos por parte de los consumidores hacia aspectos cada vez más digitales, ha propiciado que la adopción digital se haya convertido en uno de los imperativos para el viejo continente. Por otro lado, el informe evidencia que los usuarios están perdiendo confianza en los canales digitales. Concretamente en España, el nivel de confianza se ha reducido un 1,5%, con respecto a 2021, principalmente a causa del riesgo de sufrir ciberataques y la indemnización por errores.
Además, la adopción digital ha creado una gran convergencia entre los países de la Unión Europea. Austria, con siete puntos de media, y Alemania,con cinco puntos, que tradicionalmente han sido más lentos en la adopción de comportamientos digitales, han sido los países que han tenido el mayor crecimiento en adopción digital en Europa desde 2021, mientras que República Checa, con un decrecimiento de 15 puntos y Portugal, con 13 puntos, son los países que han sufrido el mayor descenso en adopción digital en Europa desde 2021.
Por último, con respecto a las nuevas tendencias, el informe refleja que los españoles estiman que la inteligencia artificial, la hiperpersonalización y el metaverso tendrán un impacto positivo en las futuras interacciones digitales, en mayor medida que el promedio europeo.