Con la llegada de la Covid-19, los gobiernos y la sociedad en general hemos mirado de nuevo a la ciencia, a la tecnología y a la innovación, buscando soluciones. Esto ha impulsado la puesta en marcha de un gran número de proyectos, muchos de los cuales están orientados a conseguir una cura y la manera de inmunizar a la población, mientras que otros están buscando soluciones creativas para afrontar las consecuencias de la pandemia y para reducir su impacto. Entre estos últimos, se encuadran los gemelos virtuales de infraestructuras y procesos de ciudades, que muestran unas capacidades y un potencial importantes para apoyar a los gobiernos municipales en la gestión de esta y otras crisis similares del futuro.
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Facilitar la colaboración entre equipos y expertos
La Covid-19 ha tenido un impacto especialmente importante en los grandes núcleos urbanos, debido a su gran densidad de población y a la complejidad inherente a la gestión de múltiples infraestructuras y servicios. En este contexto, la pandemia ha evidenciado la necesidad urgente de que las ciudades cuenten con unos mecanismos adecuados para la rápida e inteligente toma de decisiones, y para poder llevar a cabo planificaciones complejas tanto en la fase de respuesta a la emergencia en la que estamos inmersos hoy, como para adquirir la resiliencia necesaria para afrontar situaciones similares en el futuro.
Los problemas están sobre la mesa y la tecnología, por si sola, no los puede resolver, sino que los resuelven las personas. Por ello, para mejorar la capacidad de respuesta de las ciudades ante catástrofes sanitarias o de cualquier otro tipo, los diferentes grupos de expertos y los equipos capacitados deben poder trabajar en común y colaborar de manera efectiva. La tecnología de gemelos virtuales y las plataformas basadas en la nube que la soportan, facilitan esta colaboración.
Ventajas de los escenarios “qué pasa si…”
Los gemelos virtuales son modelos informáticos sofisticados con los que los núcleos urbanos pueden llevar a cabo el seguimiento de miles de parámetros, desde la descripción de sus activos, hasta todos los datos de tráfico, contaminación o población, etc. Los mismos no sólo recopilan información, sino que además son capaces de representar modelos relevantes y representativos del mundo físico, facilitando la toma de decisiones colaborativas que tendrán un impacto concreto en la vida real. Con estos modelos, las ciudades pueden ejecutar fácilmente escenarios de tipo “qué pasa si…” dentro del propio gemelo virtual, para prever lo que podría suceder en la práctica, si se toma una u otra decisión. Todo ello, recibiendo e integrando los comentarios de múltiples equipos.
Las plataformas de colaboración basadas en la nube, que impulsan estos modelos virtuales, apoyan la toma de decisiones complejas utilizando el Gemelo Virtual como fuente única para los datos de la ciudad. Dichos modelos pueden utilizarse para afrontar retos específicos como la prestación de servicios de movilidad, la gestión de residuos o la optimización del desarrollo urbano, o aplicados a proyectos concretos como la planificación y el desarrollo de un nuevo hospital o de un centro de transporte. En ambos casos, dichas plataformas facilitan la coordinación y la comprensión de las actividades gestionadas por parte, tanto de los departamentos y equipos dependientes del propio gobierno municipal, como de partes externas interesadas.
Dotarse de la resiliencia necesaria, hoy y en el futuro
En estos momentos, la prioridad de los gobiernos municipales es hacer frente a las consecuencias más inmediatas de la Covid-19 en sus territorios. Para ello, muchas ciudades a nivel global ya están empezando a aplicar software de colaboración avanzado y los modelos de gemelos virtuales, con el fin de facilitar decisiones complejas, coordinar su respuesta y mantener los servicios esenciales en funcionamiento. Pero el alcance potencial de estas tecnologías va mucho más allá, ya que las mismas también ofrecen un apoyo clave para que los núcleos urbanos puedan desarrollar su resiliencia de cara al futuro. No nos referimos únicamente a la prevención de la próxima crisis Covid-19, sino a la adquisición de una resiliencia global que abarque los múltiples ámbitos en los que se circunscriben la economía local, el entorno construido y la población.
Todavía no sabemos qué lecciones se extraerán de la actual emergencia Covid-19, pero pronto veremos cómo los arquitectos y diseñadores urbanos empiezan a buscar la manera de incorporar elementos de epidemiología y ciencia demográfica a los diseños urbanos y a la arquitectura. Surgirán nuevos tipos de proyectos para garantizar una mejor calidad del aire y para la resiliencia de las comunidades urbanas, que también incluirán factores como el apoyo a la biodiversidad. El uso de gemelos virtuales para tareas como modelar el flujo de aire en el sistema de ventilación de un edificio, la contaminación en su exterior o el impacto de sus materiales en el entorno será clave en esta evolución, extendiendo el alcance de estos modelos mucho más allá de las consecuencias directas de la Covid-19.
Captar el ‘sentir’ real de la ciudadanía en momentos de crisis
Otra área para la aplicación de gemelos virtuales en crisis sanitarias es la comunicación con los ciudadanos. Los representantes municipales electos están en primera línea en cuanto a autoridad y desempeñan un papel crucial en preparar a la población para afrontar este tipo de situaciones. Dichos representantes deben ser capaces de proporcionar información vital y relevante, adaptada tanto a las necesidades específicas de su población, como a su ‘sentir’ en relación con un evento. Las nuevas plataformas colaborativas en la nube también resultan claves para articular esta comunicación esencial, permitiendo que los gobiernos municipales sigan fácilmente las tendencias (por ejemplo, monitorizando las tendencias en las discusiones online y los hashtags utilizados), gestionen proyectos, compartan y discutan ideas y crean cuadros de mando para supervisar y dirigir sus campañas de comunicación. Adicionalmente, dichas tecnologías también les permiten crear soportes y modelos virtuales potentes, para hacer llegar estos mensajes a los ciudadanos de manera más efectiva.
