El mañana será lo que hagamos hoy. Sí, aunque parezca una obviedad es importante resaltar la importancia del momento histórico que vivimos y cómo depende solo de nosotros que lo convirtamos o no en oportunidad. Afortunadamente, parece que empezamos a doblegar esta pandemia, tanto a nivel sanitario como social y económico, que hace ya más de un año sacudía al mundo. Una crisis que puso de manifiesto la importancia de invertir en investigación, ciencia y tecnología, y que, combinadas, resultaron el arma perfecta con la que combatir esta pandemia.
Pero la crisis sanitaria también trajo consigo otros muchos desequilibrios que se manifestaron a través del distanciamiento social, convirtiendo nuestros hogares en oficinas improvisadas y en aulas de estudio, y que evidenciaron la grave brecha que vive nuestra sociedad. La digitalización que se impuso como necesaria para seguir con nuestra vida diaria visibilizó un modelo desigual de acceso a la tecnología en el hogar. Según UNICEF, un tercio de los niños de todo el mundo en edad escolar, concretamente 463 millones de niños, no pudieron acceder a la educación a distancia durante la covid-19 porque no tenían ni los equipos ni la conectividad necesarios.
Un dato que nos debe hacer reflexionar sobre la importancia de la evolución digital y los retos que debemos afrontar para el desarrollo de nuestra sociedad, con el fin de garantizar la igualdad de oportunidades entre las personas y para no dejar a nadie atrás. Un viaje que debemos recorrer todos juntos si queremos que esta transformación se produzca con éxito y para que este cambio llegue a todos los ciudadanos del planeta.
Hemos adquirido el compromiso de hacer realidad la equidad digital y llevarla a 150 millones de personas en todo el planeta en 2030
Una empresa sostenible
Y es que, desde HP, siempre hemos defendido que la tecnología es una herramienta que mejora la vida de las personas y, por ello, hemos adquirido el compromiso de hacer realidad esa equidad digital y llevarla a 150 millones de personas en todo el planeta en 2030. Esto tendrá un impacto claro en la mejora del acceso a la educación, la sanidad y el desarrollo de la actividad profesional, favoreciendo la conexión entre personas de todo el mundo y su interacción y, en definitiva, impulsando el progreso.
Porque cuando decimos que queremos ser la empresa tecnológica más sostenible y justa del mundo lo decimos convencidos de que nuestras decisiones y nuestra labor tendrán que dejar un impacto positivo en el planeta. Un viaje que queremos recorrer con otras empresas, gobiernos, asociaciones, clientes y con nuestros propios empleados y todos juntos conseguir un mundo más sostenible, inclusivo y justo para todos.