La creciente importancia que el análisis de datos está adquiriendo en todos los ámbitos de cualquier compañía está contribuyendo de forma significativa a la optimización y transformación de procesos. Sin embargo, la falta de talento capacitado para estas funciones es uno de los grandes retos a los que se enfrentarán en los próximos años. Así lo destaca el informe Analytics Trends 2016, elaborado por Deloitte.
Las nuevas tecnologías, y la amplia implantación que han logrado en las empresas en los últimos años, han generado la posibilidad a las empresas de ampliar sus conocimientos sobre sus clientes, la competencia, y cualquier novedad a nivel mundial que pueda tener impacto en su negocio. Sin embargo, no existe hoy en día una oferta igual de significativa de talento que es necesario para analizar y optimizar ese Big Data.
Con más de un 40% de compañías con dificultades para encontrar perfiles que se ajusten a sus necesidades, la brecha entre la demanda y la oferta en este terreno puede llegar a convertirse en una barrera para el crecimiento de estas compañías y una oportunidad para el empleo.
Colaboración más estrecha
Otra tendencia identificada en el informe elaborado por Deloitte es el cambio significativo en los roles que los científicos están adoptando dentro de las empresas. Cada vez es más habitual contar con este tipo de perfil en puestos de responsabilidad. La incorporación de métodos científicos en el mundo empresarial puede provocar cambios no sólo en cómo funcionan las compañías, sino también el panorama competitivo en el que se mueven. La colaboración, y competición, entre universidades y empresas para captar este talento tendrá como resultado el desarrollo de nuevas técnicas, procesos y herramientas de análisis.
La aplicación del análisis de datos tiene, según el estudio Anaylitcs Trends 2016, la capacidad de impactar en el centro de la estrategia empresarial, creando compañías que se basen en el conocimiento generado y sean capaces de integrar estrategia, personas, procesos y datos para crear ventajas competitivas. En este sentido, el uso del Analytics en partes específicas de una compañía ya no es suficiente, sino que empieza a imponerse la necesidad de crear una red que centralice toda la capacidad analítica de una determinada compañía y sea capaz de ofrecer información sobre cualquier asunto a cualquier área de la empresa.
Nuevos roles
Otra de las tendencias destacadas en el informe es la mayor colaboración entre máquinas y personas, como demuestra el hecho de que el gasto estimado en tecnología cognitiva para 2015 sea de 60.000 millones de dólares. Sin embargo, lejos de ver esta tendencia como un riesgo en lo referente a la captación de talento, las compañías deben verlo como una oportunidad para la creación de nuevos puestos de trabajo, tanto en lo referente con las funcionrs de programación, montaje y mantenimiento de las nuevas tecnologías, como en aquellos puestos que requieran un alto nivel de creatividad o empatía.
La necesidad de integrar a las personas dentro del Internet de las Cosas con el objetivo de generar nuevos modelos de negocio e, incluso, influir en el comportamiento de los individuos, es otra de las tendencias identificadas por Deloitte. En este ámbito, la innovación se está produciendo tanto en industrias enfocadas al consumidor como en las que ofrecen servicios a otras empresas, y tendrá grandes implicaciones en las industrias en las que se implemente.
