Ambiente tenso entre los operadores presentes en el XX Encuentro de Telecomunicaciones de la UIMP, organizado por AETIC y la Fundación Telefónica, tras el anuncio de la CMT de rebajar en un 50 por ciento los precios de interconexión fijo-móvil en el plazo de dos años. Los recortes de precios se empezarán a aplicar a partir del próximo uno de octubre, y supondrán una fuerte merma de ingresos para los operadores móviles. Los operadores de telefonía fija no han dicho si trasladarán esta rebaja a sus clientes.El presidente de la CMT, Reinaldo Rodríguez, quiere que “los usuarios tengan servicios mejores y más baratos”, y pretende imponer la filosofía de alquiler de redes a terceros, que ahora es vista por los operadores como una carga. Así recordó la disposición de la CMT a intervenir si los futuros Operadores Móviles Virtuales (OMV) tienen problemas para materializar sus acuerdos con los operadores. Rodríguez intenta “neutralizar los efectos de la propiedad de las redes en el mercado español”, donde solo hay una plataforma de telefonía fija, tres móviles y una parcial de cable. Esta idea prima sobre el deseo de “que las compañías españolas sean la primeras del mundo”.
Otras asignaturas pendientes, según Rodríguez, son la rebaja de los precios de la banda ancha, “que cuesta en España entre un 15 y 20 por ciento más que la media europea”, y elevar la calidad del servicio. En resumen, la CMT seguirá regulando la oferta comercial de Telefónica, y no le permitirá dar la oferta quadruple play, con voz, acceso a Internet, TV y telefonía móvil hasta que otros operadores lo hagan.
“Desconfío de las ofertas fijo-móvil que empieza a lanzar Telefónica porque no permite ver los costes de cada servicio”, lo que dificulta la vigilancia de la CMT sobre los costes, y posibles actuaciones anticompetitivas. Así contestó a Cesar Alierta, presidente de Telefónica, que habló de la necesidad de un proceso de consolidación empresarial en el mercado europeo de telecomunicaciones, porque su fragmentación “está en dirección opuesta a la construcción de un mercado interior”. Recordó que en Europa hay unos 60 operadores fijos, 79 operadores de móviles y más de 67 cableros para dar servicio a 456 millones de habitantes, mientras que los tres operadores fijos, nueve de cable y cuatro de móviles estadounidenses dan respuesta a 298 millones de personas.
Alierta indicó que tras la compra de la británica O2 y de la checa Cesky Telecom, “tenemos una verdadera escala europea, con 80 millones de accesos y una cuota de mercado del 11por ciento”. También denunció una excesiva regulación en el mercado español, ahora reforzada por las autoridades comunitarias. “Se está poniendo en peligro el empleo europeo en el sector, que tiene 1,4 millones de personas altamente cualificadas, y unas inversiones anuales que superan los 45.000 millones de euros, por un excesivo intervencionismo regulatorio”; al tiempo que abogó por las simples normas generadas por Defensa de la Competencia y la protección de los consumidores. Por su parte Antonio Viana-Baptista, responsable del negocio de Telefónica en España, desveló que Telefónica invertirá 9.000 millones de euros en nuestro país en cuatro años. Tal montante estará especialmente dirigido al desarrollo de Banda Ancha fija y móvil.
Con una visión distinta, Francisco Román, consejero delegado de Vodafone España, acusó a la CMT de favorecer a Telefónica, por considerar que la rebaja de precios en la terminación fijo-móvil supondrá una transferencia de valor hacia Telefónica de España por parte de los tres operadores móviles de unos 300 millones de euros anuales. El directivo afirmó que la coincidencia de varias medidas regulatorias por parte de la CMT y de otros organismos europeos, y la aparición de los OMV y de Xfera puede provocar “la tormenta perfecta” que provocaría enorme daño en los tres operadores establecidos, que deben mantener un enorme esfuerzo inversor para dar respuesta a las redes 3G y al HSDPA.
El consejero delegado de France Telecom España, Belarmino García, aseguró que “la telefonía móvil cada vez está más regulada, y solo les falta regular el detail. Si seguimos así, el marketing que hacemos a clientes lo hará el regulador. Esto se produce en un mercado que rebaja precios cada año, que en este año será de un 11 por ciento a cliente final. Si la CMT materializa la rebaja del 50 por ciento de interconexión fijo-móvil perderemos 171 millones de euros. Si esto sigue así, el mejor modelo español es que se instale de nuevo un monopolio”. García anunció el cierre del acuerdo con The Phone House, por el que la cadena se convierte en el primer OMV que sale al mercado español. Amena, que va a iniciar este otoño una fuerte campaña para lanzar la marca Orange, está a punto de formalizar otro acuerdo con OMV con Carrefour.
