En el segundo trimestre de 2016 se vendieron en todo el mundo 344 millones de smartphones, un 4,3% más respecto al mismo periodo de 2015. Sin embargo, según los datos de Gartner, sólo cinco proveedores de los top ten (Huawei, Oppo, Xiaomi, BBK y Samsung) registraron un incremento en sus números ganando cuota de mercado. Apple, por su parte, experimentó su tercer trimestre consecutivo de descenso. Es más, en estos meses, la firma coreana tenía casi un 10% más de participación que la compañía de la manzana. Esta prosiguió con su tendencia a la baja con una caída del 7,7%. El bajón se produjo tanto en América del Norte (su principal mercado) como en Europa Occidental y en Gran China y la región de Asia Pacífico donde sus números disminuyeron un 26%. La otra cara de la moneda fue Eurasia, regiones de África subsahariana y Europa del Este donde las ventas del iPhone crecieron más de 95%.
Por otro lado, señalar que entre los cinco principales proveedores de teléfonos inteligentes, Oppo presentó el mayor crecimiento en el segundo trimestre de 2016 con un 129%. Esto es debido a las fuertes ventas de su teléfono R9 en China y en el extranjero.
Analizando este mercado, Anshul Gupta, director de investigación de la consultora, comenta que “la demanda de teléfonos inteligentes premium se desaceleró en el segundo trimestre de 2016 ya que los consumidores esperan la llegada de un nuevo hardware para la segunda mitad del año“. Además, la disminución del 14% de las ventas de los denominados “feature phones” (teléfonos básicos) reforzó la disminución de las ventas totales de teléfonos móviles en el segundo trimestre de 2016 (ver Tabla 1).
Por sistema operativo, Android recuperó cuota con un 86% de las ventas en el segundo trimestre de 2016. Y todo gracias a la demanda tanto de terminales de gama media y baja en los mercados emergentes, como de smartphones premium, que registraron un aumento del 6,5% en dicho trimestre.
Un número de jugadores clave de Android, como Samsung con el Galaxy S7, presentó sus nuevos dispositivos de gama alta, pero las marcas chinas como Huawei y Oppo también están empujando a sus teléfonos premium con dispositivos más asequibles.
