Una vez que la banda ancha esté disponible en el mercado de forma generalizada el incremento de la competitividad en el segmento de las telecomunicaciones derivará en la transformación de los negocios de e-business, gracias a la bajada de los precios y la consideración de la conectividad en sí como un simple servicio básico, según la visión que prevé la consultora de análisis IDC. De hecho, según Jupiter Media Metrix, el número de usuarios con conexión a Internet través de banda ancha se doblará para el año 2005, pasando desde los 24 millones actuales hasta los 55 millones, la mayoría procedente del segmento corporativo.
Cuando la conectividad se convierta en una commodity, los proveedores de servicio se verán forzados a encontrar fórmulas de ingresos alternativas a las ventas del tráfico de minutos o de circuitos, predice Eric Owen, director del Programa de Servicios de Telecomunicaciones en Europa de IDC.
Las plataformas de servicios, las redes para el comercio electrónico, los portales, ASPs, m-commerce y los centros de datos en Internet se convertirán en las nuevas fuentes de beneficios de cara a las compañías de telecomunicaciones. Es por eso que la integración de este tipo de actividades en el modelo de negocio de las operadoras tradicionales servirá para crear nuevos mercados e impulsar la llegada de nuevos actores al teatro de operaciones de las telecomunicaciones.
En opinión de Eric Owen, las fusiones y alianzas de compañías que se están produciendo para alcanzar una mejor posición en el mercado desde la que influir en este predecible escenario futuro, en el que las principales aplicaciones vendrán de la mano de la convergencia digital de contenidos, la difusión de la información e Internet.
Algunos especialistas consideran que, tras un periodo que puede oscilar entre los cinco y 10 años, el mercado de las telecomunicaciones va a quedar dominado por apenas cinco o seis operadores globales.
No hay más que recordar los casos de Vodafone y Airtouch, Vodafone-Mannesmann, Vodafone-Airtel, France Telecom-Orange, las alianzas entre KPN y NTT DoCoMo (que además tiene un 15 por ciento de participación en la operadora holandesa), o la fallida fusión entre Deustche Telekom y Telecom Italia o los rumores entre la citada KPN y Telefónica, entre otras.
La llegada del tan ansiado ancho de banda vendrá de la mano de los llamados carriers de carriers (Global Crossing, KPNQwest, GTS, Loop Telecom, Colt Telecom, etc.) que actualmente se encuentran sumidos en intensos procesos de despliegue de sus redes de alta velocidad.
