La transformación del negocio de los operadores fijos hacia un modelo basado en la banda ancha se ha convertido en el gran reto de las principales compañías españolas del sector, una tendencia que se puso de manifiesto en el VII Encuentro sobre Estrategias de despliegue de la Banda Ancha, organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y Aniel. Como señaló Juan Miguel López, director de Consultoría de Negocio de PricewaterhouseCoopers, las operadoras fijas están haciendo frente a la gran competencia procedente del móvil, para lo que tendrán que basarse en el desarrollo de servicios de valor añadido apoyados en nuevos agentes que añadan ese valor diferencial.
Los operadores son conscientes de la necesidad de encarar un modelo de negocio basado en alianzas con terceros, donde estén involucrados diferentes agentes, tanto fabricantes de dispositivos como grandes compañías de diferentes sectores (música, entretenimiento, etc.) y de servicio técnico. La aparición de nuevos agentes requiere la reconfiguración del papel del operador, al que sus nuevos aliados le exigen que sea capaz de facilitar el acceso a la red, que asegure la calidad de servicio, ofrezca capacidad de almacenamiento o disponga del acceso a los sistemas de facturación, señaló Manuel Echanove, director general de Estrategia y Desarrollo de Negocio de Telefónica de España.
La proyección de este segmento de mercado se basa en la modificación de los accesos, pasando de la banda estrecha a la ancha. Según Manuel Echanove actualmente existen en España 1,8 millones de acceso de banda ancha (tanto ADSL como módem de cable), si bien para finales de año se espera que asciendan a dos millones, lo que supondrá el nueve por ciento del total de la Unión Europea. Desde Auna, Eduardo Taulet, director de Negocio Residencial, señaló que el 25 por ciento del total de accesos de banda ancha son mediante cable, y que el 35 por ciento de las líneas de Auna también incorporan esta modalidad. Unos datos que Eugenio Galdón, presidente de Ono, complementó al afirmar que la penetración de la banda ancha para Telefónica es sólo del ocho por ciento en el total de sus líneas, un porcentaje muy inferior al 35 por ciento de los ‘cableros’.
Aun así, Galdón apuntó que en zonas donde Telefónica compite directamente con Ono la operadora dominante consigue duplicar en algunos casos su penetración de ADSL, lo que quiere decir que la mayor competencia viene a estimular el desarrollo del mercado. Galdón reconoció que aunque su operadora consigue aventajar a Telefónica en la banda ancha residencial, el incumbente les aventaja en el segmento corporativo. Además, catalogó a Telefónica como el claro líder del sector de banda ancha en España, tanto por ser uno de los mejores operadores incumbentes de Europa como por su ventaja a la hora de disponer de redes desplegadas.
En este sentido, Manuel Echanove apuntó que Telefónica había invertido ya 2.000 millones de euros en desarrollo de la banda ancha.
Taulet destacó el reto que supone impulsar la banda ancha aprovechando que sólo recurren a ella dos millones de los actuales nueve millones de internautas. Entre otros factores, destacó la necesidad de aumentar la velocidad estándar de las soluciones hasta 500-600 Mbps, rebajar los precios y fomentar los ingresos por contenidos, apuntando a los sectores de música, cine, juegos y contenidos para adultos como aquellos más factibles de cobro. Asimismo resaltó la necesidad de que mejore el acceso al bucle local y de adaptar nuevas estrategias comerciales y de canales.
En este sentido, Manuel Echanove añadió la transformación experimentada por Telefónica en sus canales de ventas tradicionales, suponiendo ya el 27 por ciento del total de la plantilla, una cifra que se verá impulsada hasta el 41 por ciento en 2007.
Para Juan Miguel López, finalmente las claves de la banda ancha residirán en la innovación y la orientación hacia el cliente.