Avaya entra en el mundo de las comunicaciones en tiempo real

Cambio de tercio en Avaya, que ha presentado una nueva familia de productos y servicios de video colaboración para las empresas, con los que entra a competir de forma directa con Cisco y su tablet Cius. Avaya Flare Experience es el nombre que la compañía ha elegido para designar esta nueva línea de productos, incluyendo su nuevo dispositivo de escritorio basado en el sistema operativo Google Andorid, y con los que da el salto al mercado de la videoconferencia. “Para Avaya, este anuncio nos posiciona en otro nivel; dejamos de ser una firma de telefonía pura para ser la empresa de las comunicaciones y colaboración en tiempo real”,destaca Paz Martos, directora general de Avaya España.
En un principio el software de Avaya Flare Experience se vende con el terminal Avaya Desktop Video Device, pero dado que está basado en la arquitectura Avaya Aura (versión 6.0), estará disponible durante 2011 en otros dispositivos como PCs, tablets o smartphones. “El entorno Flare no sólo permite utilizar el vídeo para las comunicaciones, también todos los elementos que puede emplear una empresa en todas las herramientas de colaboración, incluyendo voz y datos”,explica José Paz, director de Operaciones de Ventas Técnicas en Europa Occidental de Avaya.“Además puede escalar a sistemas más complejos como las salas de videoconferencia y telepresencia”, añade.
Por otro lado, para facilitar la adopción de las herramientas Flare Experience, Avaya ha desarrollado Collaboration Server para aquellas compañías que no tengan la plataforma de Aura instalada para permitir su funcionamiento.
Forma parte también de este anuncio un conjunto paquetizado de servicios gestionados para entornos de colaboración que Avaya ofrece bajo el modelo de pago por uso; y un entorno empresarial virtual de colaboración que permite recrear un entorno colaborativo muy intuitivo y altamente integrado.
La solución completa de Flare Experience para 50 usuarios sale con un precio de lista aproximado de 20.000 dólares. Y el coste de sólo el dispositivo de escritorio es de 3.000 dólares, “un precio muy competitivo cuando se compara con lo que cuestan las salas de videoconferencia, las pantallas grandes y las soluciones de telepresencia”,comenta Paz Martos.