La Asociación Nacional de Operadores Locales de Telecomunicaciones (AOTEC) ha rechazado la liberalización del mercado de los operadores móviles virtuales advirtiendo que, de llevarse a cabo, supondría una pérdida de competencia y ha pedido que se posponga la decisión hasta que el proceso de concentración empresarial que ha vivido el sector se asiente y se pueda hacer un estudio de los servicios minoristas de telefonía.
AOTEC ha presentado las alegaciones de la asociación ante la consulta pública abierta por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la posibilidad de anular la obligación impuesta a los grandes operadores de telefonía, que poseen redes físicas, a alquilarlas a aquellas empresas que carecen de dicha infraestructura.
La entidad ha señalado que la liberalización supondría una “brusca modificación del sector” y ha pedido que se aplace hasta que el proceso de concentración empresarial que se ha vivido en los últimos años se “asiente”. Asimismo, considera “imprescindible” que se realice un estudio donde se evalúe el impacto económico para los operadores de red de la banda ancha móvil, que se encuentra en plena expansión y que a su juicio marcará el futuro.
AOTEC advierte que la ausencia de regulación supondrá una reducción “importante de la competencia”. En este sentido, recuerda que las grandes compañías han comprado a los operadores móviles virtuales con mayor peso -Jazztel y Ono- con lo que ahora “tendera´n a eliminar a los operadores de cua´druple play restantes, esto es, los operadores locales de comunicaciones” que son una “competencia muy activa”.
A su juicio, es lógico pensar que “en la medida en que el beneficio de eliminar a un competidor sea mayor” que el de facilitarle acceso a servicios móviles, se “cancelen los contratos actuales, o no firmen contratos futuros”. Se mantendrían, por contra, aquellos operadores móviles que no supusieran una competencia directa como Lycamóbil o Lebara, dado que éstos se dirigen al mercado de tráfico de voz internacional.