Un CIO para todos

Tras el Consejo de Ministros del día 20 de Septiembre de 2013, la Vicepresidenta del Gobierno anunció en rueda de prensa el inicio de “la racionalización de todo el aparato de informática de la Administración General del Estado con la creación de un jefe de informática único”. En resumidas cuentas, se trata del nombramiento del primer CIO de la AGE con la denominación de Director de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones. En los últimos años desde diferentes frentes de la Administración se ha demandado la llegada de un CIO con objeto de imitar a otros países como Estados Unidos y seguir la línea de actuación de Francia, Alemania o Reino Unido; pero también se ha encontrado entre las propuestas de la Comisión de la Reforma de las Administraciones Públicas (CORA) y, con anterioridad, Astic apostó claramente por su creación “como una de las medidas estructurales necesarias para reformar nuestra Administración”. Es un hecho que la llegada de Domingo Javier Molina -hasta ahora director del Departamento de Informática Tributaria- cuenta con un amplio consenso, sobre todo después de que se haya reclamado de manera incesante dotar al organigrama actual de un liderazgo organizativo del que carecía, debido en parte a la existencia de organismos públicos demasiado distantes entre sí y desprovistos de una estrategia común. Pero su tarea no será sencilla, tendrá que lidiar con prácticas todavía demasiado arraigadas y con ciertos profesionales reacios a este tipo de transformaciones. Sin embargo, pienso que serán situaciones testimoniales sin que entorpezcan la estrategia global que Molina debe poner en marcha. Tiene en su haber ser un profesional público de Tecnologías de la Información, una de las características también solicitadas desde el propio seno de la Administración: “es una excelente noticia”, ha comentado al respecto a Computing el presidente de Astic, Emilio García, reforzando esta tesis y subrayando lo que denominan “la lógica de la razón”. Por otro lado, podría decirse que el Gobierno ha rectificado sobre la decisión que tomó hace tres años para suprimir la Dirección General para la Sociedad de la Información, que actuaba como eje de actuación de la Administración Pública. Por todo ello, es una buena noticia para la Administración y las TIC contar con un dirigente que coordine las estrategias tecnológicas de la administración pública estatal y que, sobre todo, posibilite transformar la Administración de la mano de la tecnología.