La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha una experiencia piloto en Córdoba con 200 permisos de nueva expedición que ha de servir para perfilar los detalles del carné digital.
El proyecto piloto viene a impulsar el desarrollo de un carné digital que desarrollará la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre-Real Casa de la Moneda (FNMT-RCM) y cuyo prototipo, adaptado a las normativas de la Comunidad Europea para este tipo de documentos, fue presentado en el recientemente celebrado en Madrid Congreso Internacional de Tarjetas.
El nuevo modelo de carné de conducir, conocido como proyecto Perseo, se basa en un nuevo formato de tarjeta de plástico cuya puesta en marcha aún depende del desarrollo y posterior aprobación de un reglamento para la modificación de la Ley de Seguridad Vial, que podría estar en vigor a lo largo del presente año. Además de incorporar una fotografía y firma del titular digitalizadas, el carné contendrá la misma información que el actual permiso en el soporte de papel.
El nuevo modelo de carné de conducir, que ya funciona en algunos países europeos según la FNMT-RCM, comenzó a ser desarrollado en 2001 por este organismo, el único con el que la DGT mantiene una estrecha colaboración para ultimar el nuevo modelo de permiso.
El nuevo permiso, además de un formato más resistente al deterioro y de fácil manejo, mejora de forma significativa el aspecto relativo a la seguridad gracias a la incorporación de nuevas técnicas (impresión de microlíneas, impresión visible con luz ultravioleta, lámina de seguridad holográfica de protección, grabación con rayo láser e imágenes codificadas) que evitan posibles manipulación.
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