Toshiba España registró una facturación de 172 millones de euros en el año fiscal 2002-2003 (cerrado en marzo), lo que significa un incremento del 8,5 por ciento en relación con el ejercicio precedente, según los datos ofrecidos por el presidente de la filial, Xavier Pascual. Además, el directivo atribuye los buenos resultados del grupo en España a la oferta de productos bien posicionados, la apuesta clara de transmitir la propuesta de calidad de Toshiba y la confianza que el canal de distribución ha depositado en la compañía, subrayando que el enfoque estratégico de la compañía se centra en la movilidad y en el citado canal de distribución.
El presidente de Toshiba España también ha indicado que el mercado está asumiendo el mensaje de movilidad y de tecnología inalámbrica, así como que el segmento de gran consumo está creciendo más que el corporativo. En esta línea, el grupo prevé que la tendencia se mantenga durante los próximos dos años.
En cuanto al segmento de las pymes, Pascual destaca la buena acogida de sus propuestas inalámbricas y afirma que su compañía intenta ser el socio tecnológico de las empresas que están dando mayor contenido a la movilidad.
Por otra parte, el directivo ha revelado que, a escala corporativa, se están manteniendo negociaciones con Telefónica ante la posible entrada en el mercado de teléfonos móviles en nuestro país, lo que reforzará el mensaje de movilidad que intenta transmitir el grupo nipón. Actualmente, Toshiba comercializa terminales en Francia, Alemania, Reino Unido y los países del Benelux.
Finalmente, la división informática de Toshiba España totalizó unos ingresos de 115 millones de euros por venta de portátiles, un 18,1 por ciento más que en el año fiscal 2001-2002.
