Silicon Graphics (SGI) ha puesto en marcha un plan de reestructuración con el fin de reducir costes. Así pues, dentro de las medidas contempladas, la compañía ha confirmado que suprimirá 600 puestos de trabajo de áreas específicas, cantidad que se suma a los casi 400 despidos anunciados el pasado mes de mayo, lo que supone aproximadamente un recorte del 25 por ciento de la fuerza laboral durante los dos últimos trimestres. Como resultado de tal reorganización SGI registrará unos gastos de alrededor de 20 millones de dólares.
Con esta medida, en diciembre, la firma pretende reducir sus gastos operativos a 100 millones de dólares, lo que le permitirá alcanzar su punto de equilibrio con unos ingresos operativos trimestrales que oscilan entre los 235 y los 240 millones de la misma moneda.
En este sentido, Bob Bishop, presidente y CEO de SGI, aclara que “se han realizado importantes lanzamientos de productos en los dos últimos trimestres y ahora estamos en posición de mejorar nuestras finanzas”.
Actualmente, la compañía está concentrando sus esfuerzos en las áreas de informática de alto rendimiento, almacenamiento y productos de visualización, aunque también espera obtener ingresos de los desarrollos Linux y de fuente abierta.
