Prosegur

El Grupo Prosegur está afrontando un plan de tecnologías de la información que afecta a la práctica totalidad de los sistemas de información y a la remodelación de las infraestructuras.

Publicado el 04 Abr 2001

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El grupo Prosegur es la primera multinacional española de seguridad y líder en el mercado nacional. Como fruto de su vocación internacional, la compañía está presente en Latinoamérica (Argentina, Chile, Uruguay y Panamá) y en países del sur de Europa como Italia, Portugal.

Las ventas totales del grupo superaron los 113.000 millones de pesetas en el 2000, con un beneficio neto de casi 8.500 millones de pesetas. Los fuertes crecimientos alcanzados respecto al ejercicio anterior (un 95 por ciento en el capítulo de resultados) explican por sí mismos la bondad del plan estratégico que la compañía empezó a desarrollar, durante el pasado año, cuando se tomó la decisión de centrar la actividad en el negocio de la seguridad.

Una decisión que se ha diseñado en base a una profunda reorganización funcional y de procesos, de las responsabilidades y de la apuesta por el mercado internacional y por la aplicación masiva (además de su modernización) de las tecnologías en el ámbito de un grupo cuya actividad se desarrolla actualmente en tres grandes líneas de negocio -vigilancia, transporte de fondos y protección activa- y tres departamentos de soporte para las áreas de recursos humanos, finanzas y Tecnologías de la Información.

El hecho de que la responsabilidad de las TI se encuadren bajo una dirección general es algo poco habitual en el mundo de la empresa privada, e implica, por sí mismo, una manera de entender el papel que deben asumir las tecnologías en el conjunto de la empresa. Enrique Parra, director general de Información, Telecomunicaciones y Tecnología, lo explica de manera convincente para Prosegur el área de sistemas tiene un alcance que va más allá del simple soporte a la gestión del negocio, una faceta que, con ser fundamental, se supone como un valor tradicionalmente aceptado. La verdadera importancia de las tecnologías radica en su capacidad para impulsar un cambio estructural y organizativo y como plataforma para el desarrollo del negocio actual y futuro; un protagonismo, en este caso, acorde con los planes de transformación a los que se está sometiendo el grupo.

Un proceso que afecta a la propia naturaleza del negocio, a su organización interna y, por supuesto, a la modernización de las infraestructuras de proceso y de comunicaciones. Un proyecto de cambio, en definitiva, que permita a Prosegur cumplir su principal objetivo de seguir liderando el mercado de seguridad nacional y convertirse en uno de sus principales actores internacionales.
Hemos puesto en marcha un CRM, basado en la solución Oracle, en el área de protección activa, un sistema ERP del mismo proveedor (Oracle Financials), un nuevo sistema de gestión de nuestra actividad de transporte de fondos y, en este trimestre, arrancaremos el una nueva operativa de vigilancia. Y estas plataformas implican además de unos nuevos modelos de trabajo, una mayor capacidad para impulsar el negocio, para convertir a la TI en un auténtico motor de la actividad, explica Parra.

Para alcanzar este nivel de desarrollo, Prosegur ha quemado etapas con una rapidez poco frecuente. En poco más de un año, se ha propiciado un nuevo diseño que afecta al conjunto global de las arquitecturas de proceso, de telecomunicaciones y de sistemas de información.

Un proyecto que partía de una base ciertamente precaria en medios y soluciones. Que tenía que solventar el paso desde unas aplicaciones antiguas hacia plataformas modernas basadas en estándares de mercado. Y que debía, como objetivo prioritario, solventar un problema de comunicaciones para lograr la conexión de más de cien centros dispersos por la geografía española Casi todo se ha hecho en paralelo, es decir, se han implantado los nuevos sistemas al mismo tiempo que se creaba un nuevo CPD y se evolucionaba la infraestructura LAN/WAN del Grupo. La mayoría de los trabajos fundamentales quedarán finalizados a lo largo de este año, es decir habremos creado la base con la que afrontar nuevos proyectos que ya tenemos en mente, comenta Parra.
El CPD anterior a 1999 se basaba en un sistema propietario de Hewlett-Packard que soportaba aplicaciones desarrolladas específicamente para Prosegur y con unas antigüedades medias entre 8 y 15 años. Se trataba de una arquitectura centralizada, en la que las delegaciones y oficinas contaban generalmente con pocos recursos informáticos. Las comunicaciones, por su parte, se basaban parcialmente en un sistemas Ibercom y alguna línea punto a punto, por los que transitaban bloques de información para su consolidación posterior en el centro de proceso de datos central; un sistema que alcanzaba unas buenas prestaciones a buen precio, pero con un enfoque muy administrativo y poco atento al soporte de las operaciones. En definitiva un sistema rígido que se estaba quedando atrás y que era manifiestamente incapaz de apoyar los nuevos planes de negocio.

Ante esta situación, la primera etapa de evolución se centró en el apartado de la infraestructura de telecomunicaciones mediante la implantación de una red en estrella, que permitiera aumentar drásticamente la capacidad de ancho banda y distribuir proceso en local para alcanzar la máxima autonomía de funcionamiento en cada uno de las oficinas de la red un criterio que entendemos decisivo, junto al de conseguir también una estructura centralizada que permita procesos rápidos de consolidación de la información. Nuestros centros deben disfrutar de la mayor autonomía posible desde la perspectiva de la operación del negocio, pero también debemos aprovechar al máximo la capacidad de la red para optimizar nuestros procesos de toma de decisiones, asegura el director general de TI.

La nueva red de datos está a día de hoy prácticamente integrada sobre líneas frame relay de distinta capacidad bajo os servicios de Telefónica (mayoritariamente) y de Retevisión; una dualidad puramente estratégica nuestra postura en el área de telecomunicaciones se basa en cuestiones de servicio, pero parte del postulado general de que el coste de las telecomunicaciones es artificialmente alto, y con ello quiero decir que los precios no se ponen en función de lo que realmente cuesta el servicio, sino de lo que el cliente está dispuesto a pagar. Esto significa que el margen de maniobra de los operadores es más amplio de lo que se refleja en las facturas mensuales que abonamos por los servicios. Si a esto se añade que rápido cambio tecnológico en este campo impide a muchos usuarios mantener un buen conocimiento de la evolución, pensamos que la mejor opción es mantener la mente abierta y aprovechar las bazas que la competencia del mercado te brinda. Realmente no espero que las comunicaciones bajen de precios, ya me gustaría, pero si que el servicio mejore en capacidad y continuidad, sin elevar el gasto. De ello dependerá en buena medida la evolución hacia VoIP que ya hemos definido.

En los sistemas de proceso, la evolución se ha dirigido hacia sistemas abiertos. Unix se ha convertido en el eje de los servidores corporativos de bases de datos y Windows NT en la estrella de los entornos de red local. Una nueva gama de servidores HP 9000 (modelos L y M) han sustituido a los antiguos HP 3000 y todos los centros de trabajo operan en red local con plataformas de Microsoft.
Prosegur ha elegido a Oracle para implementar una solución de gestión de relaciones con clientes (CRM) en el área de negocio de protección activa y poder así atender a los fuertes crecimientos de las cifras de usuarios, que superan las 120.000 conexiones en todo el mundo. En el área de transporte nuestros clientes se cuentan por centenas, en el de vigilancia por miles, pero en protección activa no encontramos con decenas de miles de clientes que exigen cada vez de mejores soluciones a sus problemáticas. La implantación de un CRM en este negocio es necesaria para ofrecer un servicio diferencial que permita la fidelización de los usuarios más allá de cuestiones puramente ligadas a los precios.

El proyecto presentado por Oracle está en su etapa terminal tras diez meses de implantación y ha incluido las fases de consultoría, integración y formación. La solución se compone de los módulos CRM para ventas, contratos, servicios, inventario y facturación, y facilita, según Enrique Parra, la escalabilidad para atender las diferentes necesidades de expansión de la herramienta y un soporte internacional en cada uno de los países donde Prosegur tiene actividad.

Por otra parte, la compañía puso en marcha, el pasado mes de noviembre, un nuevo ERP financiero basado en la plataforma Oracle Financials, con el objetivo de integrar la operativa de sus procesos internos con la gestión de sus clientes. La mayoría de los módulos trabajan en arquitectura cliente/servidor, aunque algunos están aprovechando ya las vías web provistas por el desarrollador, como es el caso de gastos de viajes y compras. La puesta en marcha de las soluciones CRM y ERP y los nuevos desarrollos de sistemas de información para las áreas de transporte y vigilancia, Prosegur habrá dado un giro de ciento ochenta grados tecnológicos en un tiempo récord y, lo que es más importante, habrá adaptado su actividad a los objetivos de negocio.

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Redacción Computing

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