En 2016, el Grupo Pagero, multinacional sueca de servicios de factura electrónica, comenzó a operar en nuestro país. Pascual Gómez, responsable de Desarrollo de Negocio, explica la evolución de su compañía y del mercado de la eFactura en España.
Hace un año tuvimos el placer de entrevistar a Alexander Jansson, director de PGN para el Sur de Europa. ¿Qué es lo que ha pasado en PGN durante este tiempo?
P. G.: Junto a la expansión internacional, hemos tenido también un gran crecimiento local. Antes, Alexander era cabeza, manos, pies y corazón de la organización, pero ahora tenemos la suerte de contar con un gran equipo que está haciendo realidad nuestra previsión de seguir creciendo. Hemos pasado de ser una organización de cinco personas, a ser 30 ahora mismo y esperamos acabar con 10 más a finales de año.
¿Cuál es su política de alianzas?
P. G.: En cuanto al área de partners, la perspectiva es la de una empresa global que presta un servicio internacional, por eso siempre hemos procurado ir con agentes del mercado, como Microsoft. Nuestro enfoque inicial fue trabajar para sacar adelante acuerdos de colaboración internacionales (Thomson Reuters, Microsoft, Deloitte, MasterCard, IFS, etc.) dentro de las distintas verticales que distinguimos: Recomendación, ERP/Workflows, Consultoría e Integradores. Cabe destacar el acuerdo cerrado recientemente con Gosocket, que nos permitirá ampliar nuestra influencia en Latam.
También han formado una alianza con Thomson Reuters…
P. G.: Yo vengo de Thomson Reuters, lo que nos proporciona una ventaja, ya que he aprovechado todo el conocimiento que tengo de ambas compañías, permitiéndome tocar a las personas correctas para avanzar con ello, como a Nazar Paradivskyy, VP de Compliance de PGN, quien fue el encargado de llevar las negociaciones a buen puerto.. Dentro de lo que es nuestro acuerdo global estratégico, ellos son los que van a dar el servicio de tax compliance de indirect tax, y nosotros nos vamos a encargar de la facturación.
¿Cuál es la normativa en la que están encontrando más problemas sus clientes?
P. G.: En España tendemos a ir un poco a rebufo, y la directiva sobre facturación electrónica ha sido clave. A partir del 18 de abril del 2019 la normativa se volvió de obligado cumplimiento, por lo que ahí fue donde empezaron los nervios, aunque en el mercado parece que aún no hay mucha prisa.
Con respecto a la facturación electrónica, parece que a España le ha costado más que a otros países…
P. G.: 2008 fue duro con España, por lo que los años posteriores no han sido una buena etapa para la inversión, sobre todo en tecnología, que parece que esa área siempre cuesta un poco más de priorizar. Pero las cosas están cambiando, miro al mercado y me alegra ver a directores de innovación que trabajan de manera tangencial a la organización, buscando respuestas para mejorar sus procesos y cumplir con las normativas.
¿Cómo pueden sobrellevar las organizaciones el compliance con su expansión internacional?
P. G.: En compliance tenemos a un equipo interno al que puedes tener un acceso rápido y directo en cualquier punto del camino. Ellos se encargarán de resolverte las dudas que tengas sobre la situación del mercado o de una empresa en particular. Tenemos la capacidad de ofrecer una respuesta directa y eficaz a todas esas empresas.
¿Cuáles son los planes de futuro?
P. G.: En España, seguir creciendo. Durante el ejercicio 17-18 tuvimos un crecimiento por encima del 35% y, durante el pasado ejercicio, el crecimiento fue superior al 40%. En el primer trimestre de 2019 hemos crecido un 45%; es un incremento alto, pero es el que el mercado pide. Hace tres años empezamos el plan de expansión internacional, nuestras primeras oficinas fueron en UK y en España, y nos gustaría que España se estableciera como el punto de referencia para el Sur de Europa y Latinoamérica. Queremos duplicar nuestra plantilla e ir adaptándonos al mercado que está naciendo.