Coincidiendo con el décimo aniversario de su presencia en España, Oki ha hecho públicos los resultados correspondientes a su ejercicio fiscal 2002, cerrado el pasado mes de marzo. En tal período registró un incremento del 18 por ciento en su volumen de ventas respecto al año anterior, logrando un total de 88 millones de euros, cifra que supera en un 80 por ciento las previsiones iniciales. Por su parte, los beneficios antes de impuestos han aumentado un 57,7 por ciento sobre los resultados del pasado ejercicio.
Atendiendo a la clasificación por productos, ha sido la gama de impresoras láser color y la parte de consumibles las que mejor han respondido, mientras que el segmento de láser LED monocromo se ha mantenido estable y el de matriciales ha caído ligeramente, con un 18 por ciento de las unidades vendidas. En este sentido, Javier Toledo, consejero delegado de la filial en España, ha mostrado su satisfacción por los resultados obtenidos que “han elevado a Oki a la segunda posición del ranking de impresión láser a color por detrás de HP” y se muestra optimista de cara al futuro.
Así pues, señala que “en 2002 se vendieron unas 12.000 unidades de láser color, mientras que en el primer trimestre de 2003 ya se ha comercializado casi la mitad de dicha cifra. Por tanto, para 2003 los pronósticos de ventas oscilan entre las 24.000 y las 32.000 unidades ya que la oferta a color cada vez se aproxima más en precio a las necesidades del mercado”.
Respecto a la estrategia para el presente ejercicio, Toledo destaca que “la ampliación del target, liderar la evolución del mercado de color y mantener el compromiso con el canal y los usuarios, así como posicionarse en el mercado SoHo y concentrarse en su núcleo de negocio, son los principales objetivos a cumplir”. Así, haciendo referencia a este último punto, el directivo señala que la venta de Olimpia en 2002 fue parte de su estrategia de focalizarse en su “core business”.
Del mismo modo, advierte que consolidar su presencia en la Administración central y mejorar la penetración en la Administración periférica debido a los procesos de descentralización, son otra de sus metas. Paralelamente ha aumentado los recursos destinados a la gran cuenta, donde se concentrará en los segmentos de industria, servicios y banca.
Por otro lado, la compañía aprovechó para anunciar nuevos dispositivos en la gama de impresión láser, monocromo y matricial, así como en faxes, siendo tónicas en todos ellos la simplicidad de manejo, el precio reducido, los ahorros en el coste por impresión y las mejoras en “impresión inteligente”.
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