Si el anuncio de la compra de Meta4 por parte del Grupo Adonix cayó como un garro de agua fría sobre los accionistas minoritarios, que se desayunaban con la noticia sólo dos días antes del tan anunciado, y ahora frustrado, listado de la compañía en el índice Euronext; el bajo precio -seis millones de euros- que la firma de origen francés pagará por las acciones de Meta4, hará que los accionistas minoritarios pierdan todo el dinero invertido en el proveedor de software español, ya que después del pago de las deudas a los acreedores así como del coste asociado al proceso de liquidación, los accionistas titulares de acciones Clase C (en gran medida el fondo de inversiones General Atlantic Partner), tendrán la ‘suerte’ de recibir menos del importe debido, que se había fijado en el precio de la compra multiplicado por dos, pero no quedarán fondos disponibles para distribuir entre los accionistas titulares de acciones preferentes Serie B o Convertible Preferred Shares, ni para los accionistas titulares de acciones ordinarias, como ha reconocido el Consejo de Meta4, una empresa sobre la que la CNMV no tiene jurisdicción ya que cotizaba como compañía holandesa.
Ante las preguntas de Computing sobre este tema, el vicepresidente de Marketing, Ventas y Alianzas de Meta4, Pierre Paradis, respondió que efectivamente, incluso nosotros, empleados, vamos a perder dinero; pero en la Bolsa se juega y a veces se gana y otras se pierde. El asunto se ha convertido en la madera que hace arder un foro asociado a Meta4 en el portal Invertia en el que participan pequeños accionistas directamente perjudicados por la compra, que no se resignan a ver como la innovación fruto de su esfuerzo inversor pasa a manos de una empresa extranjera y que consideran que esta operación sólo favorece al Grupo Adonix y a GAP que, curiosamente, cuenta entre sus empleados con el actual presidente de Meta4, Loek van der Boog.
Al cierre de esta edición, se apuntaba la posibilidad de que el anuncio de la compra por parte del Grupo Adonix fuera un órdago de GAP para conseguir que otra empresa lanzará una mejor oferta; pero parece que el fin último es más ambicioso: la creación de un ERP completo capaz de competir en primera línea. Y es que después de entrar en el capital de SSA GT, GAP compró a Invensys junto con Cerberus la compañía Baan, que durante los buenos tiempos mantuvo una relación muy estrecha con Meta4 y ahora ha sido absorbida por parte de SSA GT. El ingrediente Meta4 suma a este cóctel el componente de gestión de RRHH y conocimiento, además de su presencia en América Latina, mientras que el Grupo Adonix aporta sus cinco subsidiarias en Europa.
La estrategia es buena pero pasa por alto a los pequeños accionistas, incluyendo muchos empleados de Meta4. ¿Cuánto vale el código, las inversiones en la web inteligente, los proyectos de la Unión Europea, la cartera de clientes….?, se pregunta uno de los inversores afectados, quien reconoce que me duele por mi bolsillo, pero también porque un extraordinario proyecto informático español pase por 30 monedas a manos extranjeras .
