Los proveedores de servicios Internet (ISPs) vuelven a velar armas ante una nueva reestructuración del sector que ha de derivar en la consolidación definitiva de un mercado caracterizado por los cambios constantes y la saturación durante los últimos años. Una encuesta realizada por Outrade.com entre 45 directores de ISPs pertenecientes a la Asociación de Proveedores de Servicios Internet (ISPA) revela que el 40 por ciento de estos desaparecerán antes de finalizar el año 2002, mientras que otro 17 por ciento será adquirido por compañías que sobrevivan en el mercado.
El estudio predice que los ISPs ligarán su futuro al diseño de ofertas basadas de servicios de valor añadido, como voz sobre IP y mensajería unificada, que les permita aumentar sus ingresos y les proteja de la inestabilidad del mercado. Sin embargo, no todos están de acuerdo sobre este pronóstico y Lee Strafford, director general del ISP Plusnet, considera que los proveedores de servicios Internet no abordarán los servicios de voz, un terreno que quedará en manos de las compañías de telecomunicaciones, para centrarse más en llevar hasta los usuarios -tanto a los puestos de trabajo como a los dispositivos móviles- los servicios de datos basados en la banda ancha.
La encuesta también recoge que el correo electrónico, a pesar de su uso masivo, no supone ninguna panacea para los ISPs, ya que sólo representa el 16 por ciento del total de los ingresos, mientras que supone el mismo porcentaje en términos de coste.
Clive Longbottom, director de servicio en Quocirca, apunta que el estudio apunta nuevas evidencias del estado en que se encuentran los modelos de negocio del mercado de las TI, muchos de los cuales no han respondido a las expectativas inicialmente depositadas en ellos. Hay muchos ISPs que parecen que comienzan por capricho y sus planes de negocio no han sido nada realistas. Creyeron que podrían volver a captar más dinero de las firmas inversoras, pero esa gente no es tonta, explica.
El estudio considera a la falta de liquidez como la mayor causa actual de la crisis de los proveedores de servicios Internet, según especificaron el 42 por cientos de los encuestados, con aproximadamente un 25 por ciento que reconoce que no dispone de fondos suficientes para llevar a cabo sus planes. El directivo de Quocirca pone en duda la viabilidad de los servicios de voz sobre IP porque sólo sería rentable ofrecerlo cuando se cuenta con un entorno adecuado que permita asegurar esa calidad. Un ordenador no es un teléfono y se debe contar con centralitas para VoIP y teléfonos inteligentes. Además, añade que los ISPs deberían comenzar a asumir funciones propias del canal de distribución, actuando como resellers de los fabricantes de hardware de voz IP para plantear sus propios planes de negocio en esta área.