Lenovo está sufriendo los retrocesos del mercado mundial de PC, donde se mantiene como primera marca por unidades vendidas. En el primer trimestre de su año fiscal, que finalizó el pasado 30 de junio, la multinacional china facturó 10.100 millones de dólares, un 6% menos. Eso sí, los planes de ajuste de la compañía están surtiendo efecto, y así el beneficio neto subió un 64% en el periodo, hasta los 173 millones de dólares.
Por segmentos de negocio, el principal, el de PC y tabletas, dio lugar a unas ventas totales de 7.000 millones de dólares, un 7% menos. En todo caso, Lenovo reedita su posición de líder mundial del mercado de ordenadores, y lo hace, con un 21,1% de cuota, por 13º trimestre consecutivo. Entre abril y junio, Lenovo lanzó al mercado 13,2 millones de máquinas, un 2,3% menos que en el mismo periodo del año precedente.
Mientras tanto, en el área de teléfonos móviles, donde Lenovo compite con su propia marca y con los celulares de Motorola, la compañía china también sufrió un retroceso. Las ventas ascendieron a 1.700 millones de dólares, un 6% menos. Mejor le fueron las cosas a la firma asiática en el ámbito del centro de datos, donde comercializa servidores, almacenamiento, software y servicios. Hay que recordar que Lenovo compró en su momento la línea de servidores Intel (System x) de IBM. Pues bien, en este terreno, Lenovo facturó 1.100 millones de dólares, un 1% más. La unidad de centros de datos tiene dificultades en mercados maduros, pero ha reforzado su posición de liderazgo en el mercado chino, donde ha crecido un 14% en términos de facturación.
Por áreas geográficas, cabe destacar que Lenovo facturó en EMEA un 7,3% menos, hasta totalizar 2.500 millones de dólares en la región. EMEA supone casi un cuarto (en concreto un 24,5%) del negocio mundial de Lenovo, mientras que China supone un 28,4%; Asia-Pacífico, un 16,7%; y el continente americano, un 30,4% del total.