A pesar de que el 76 por ciento de las empresas españolas ubicadas en zonas urbanas cuentan con acceso a Internet, su nivel de satisfacción es bastante limitado debido principalmente a la escasa fiabilidad y velocidad del servicio, especialmente en determinadas franjas horarias. Según revela un estudio realizado por Broadnet entre más de 500 empresas españolas, la mayoría de las aplicaciones utilizadas actualmente están limitadas al correo electrónico y a la búsqueda de información. De hecho, sólo un cinco por ciento de las empresas incorpora Internet a sus operaciones de negocio habituales.
De esta forma, ante la creciente importancia que las empresas españolas están concediendo a Internet, el informe revela que el 45 por ciento de ellas tienen previsto la contratación de servicios de banda ancha, incluso el 25 por ciento espera hacerlo de forma inmediata. Como consecuencia, las empresas consultadas están dispuestas a incrementar el presupuesto mensual dedicado a los servicios de Internet hasta en un 40 por ciento en algunos casos.
Otro de los aspectos más destacables del informe es el cambio en la orientación en los criterios de selección de proveedor de acceso debido al mayor interés de muchas empresas por convertir a Internet en una herramienta de negocio que les aporte valor añadido. Si hasta ahora el precio ha sido el principal factor a tener en cuenta, están comenzado a cobrar importancia otros aspectos como la credibilidad del proveedor, su capacidad de asesoría, la rapidez de servicio y la fiabilidad de sus ofertas de precios, desconfiando los clientes de ciertas promociones.
Entre las principales demandas de las empresas en materia de aplicaciones, la principal prioridad son los servicios de comercio electrónico, ocupando un lugar secundario el albergue de servidores internos o aplicaciones de nóminas y contabilidad.
Por otra parte, un estudio de NetValue pone de manifiesto que sólo el 3,1 por ciento de los hogares españoles dispone de conexión a Internet de banda ancha, muy por detrás de otros países de su entorno como Francia (6,1 por ciento), Dinamarca (5,8) o Alemania (5,1 por ciento).