La Universidad Complutense de Madrid “virtualiza” un ahorro de un millón de euros

La Universidad Complutense de Madrid es una de las instituciones educativas españolas más innovadoras en el uso de las Tecnologías de la Información, y así lo vuelve a demostrar uno de sus últimos proyectos emprendidos: el abordaje de un complejo proyecto de virtualización, junto con una infraestructura de balanceo de cargas.

Publicado el 20 Sep 2010

La necesidad de la Universidad Complutense de Madrid era tratar de responder a una demanda creciente en el despliegue de nuevos servicios hacia la comunidad educativa, con unos ratios de crecimiento interanual cercanos al 30 por ciento. Por ello, ha adjudicado a VMware y Radware la realización de dicho proyecto, que busca conseguir el balanceo de cargas, permitir la alta disponibilidad de servicios, y ofrecer continuidad del servicio sobre todo en picos de trabajo.
Unos picos, que como ha desvelado a COMPUTING Manuel Hernández Urrea, director del Área de Seguridad, Redes e Infraestructura de los servicios informáticos de la Universidad Complutense de Madrid, el número de sesiones que soportan en un día normal “es una media de 23.000 sesiones por hora, pero los nuevos equipos son capaces de responder incluso a picos de 60.000 sesiones por hora, que se producen entre las 10 de la mañana y las 14 de la tarde, sin que perjudique al tiempo de respuesta. Asimismo, sobre el tráfico soportado, tanto de entrada como de salida (444.31 megas de entrada y 471.06 megas de salida), los picos se dan a las 12 de la noche debido a los backups, pero la media de tráfico soportado en un día normal se sitúa en torno a las 75,26 megas de entrada y 81,97 megas de salida”. El objetivo de la Universidad era independizar el hardware de los servicios y permitir el uso de recursos entre los dos centros de procesos de datos (Rectorado y Centro de Cálculo) existentes. La idea es que un sólo centro fuera capaz de asumir las cargas de trabajo de los dos de forma que no se perdiera la continuidad de los servicios ante una catástrofe. Por tanto, la Universidad ha implantado la tecnología de VMware para distribuir y mantener las cargas entre ambos centros de manera libre, y desplegar servicios nuevos en menos de 48 horas sin necesidad de incrementar los recursos de personal.
En este aspecto, una de las preocupaciones de la UCM era que quería mantener los gastos de personal dedicados a la explotación y mantenimiento de la infraestructura tecnológica, reduciendo los tiempos de puesta en marcha de nuevos servicios y respetando los consumos energéticos. Gracias al proyecto llevado a cabo, la Universidad cuenta ahora mismo con los mismos recursos que hace tres años en el área de sistemas, a pesar de que los servicios ofrecidos han crecido en más de un 20 por ciento. De hecho, según datos de la Universidad, en la actualidad existe un técnico por cada 30 servidores.
Por otro lado y paralelo a este proyecto, también se decidió renovar la infraestructura de hardware. Como nos ha adelantado Juan Carlos Herráiz, subdirector del área de Sistemas de los servicios informáticos de la Universidad Complutense de Madrid, “hemos actualizado la plataforma de servidores pasando de un modelo basado en equipamiento individual del fabricante HP y constituido en su mayor parte por servidores DL360 y DL380, a una plataforma Blade C 7000 con Virtual Connect y almacenamiento HP EVA 8100”.
Esta primera fase de virtualización ha sido llevada a cabo en colaboración con Anadat Consulting, que realizó una prueba de concepto que incluía la implantación de un entorno de pruebas con cuatro servidores físicos y con un alcance no superior a la virtualización de entre 15 y 20 servicios. Posteriormente, y una vez validada la tecnología, se decidió abordar el proyecto en distintas fases, recogiendo durante los siguientes tres años la consolidación de más de 240 servicios y máquinas virtuales sobre una plataforma cercana a los 40 hosts, distribuidos en dos centros diferenciados (Centro de Cálculo y Rectorado). Una vez operativo el sistema, la UCM ha observado un ahorro de casi un millón de euros y la posibilidad de recuperación de cualquier servicio virtualizado en menos de 60 minutos.
BALANCEO DE CARGAS
Complementa a este proyecto de virtualización, la instalación de una infraestructura de balanceo de cargas a fin de poder integrar diferentes servicios heterogéneos, que permitiera una gran escalabilidad y disponibilidad de los mismos, y resolver los problemas derivados de la complejidad topológica que presentaban algunos de esos servicios.
Para ello, frente a las ofertas de F5 o Alteon, la UCM ha incorporado dos switches bajo demanda AppDirector del modelo 1016 de Radware, con los que da cobertura y alta disponibilidad a todos los servicios, especialmente durante cargas de trabajo muy elevadas. “La Universidad Complutense eligió los productos de Radware porque se ajustaban bien a los criterios funcionales exigidos y por las buenas referencias obtenidas por parte de otros clientes y en publicaciones relacionadas con las tecnologías de TI”,nos explica Manuel Hernández Urrea, director del Área de Seguridad, Redes e Infraestructura de los servicios informáticos de la Universidad Complutense de Madrid. “También fue un factor muy importante la experiencia positiva previa obtenida con un proyecto piloto de balanceo de antivirus perimetral para el correo con el equipo de Radware CID (Content Inspection Director)”, añade.
Técnicamente, el despliegue de los balanceadores de carga se ha llevado a cabo en los dos centros de datos de la UCM. Actualmente, uno de ellos está activo, mientras que el segundo funciona de forma pasiva, por si fallara el primero, para poder dar así soporte a la web institucional de la Universidad, a la aplicación de Gestión Académica, al Campus Virtual y a los servicios de correo, directorio o gestión económica, entre otros servicios. De esta manera, la carga generada por los usuarios en sus consultas a diferentes aplicaciones y servicios es distribuida de forma dinámica entre los diferentes servidores.
Anteriormente a este despliegue, la Universidad ya había adquirido dos equipos web server director de Radware, así como dos aceleradores SSL CertainT 100, para crear un entorno distribuido de balanceo de carga redundado. Sobre estos equipos se fueron integrando después algunas aplicaciones y servicios de carácter estratégico. Posteriormente, la institución educativa inició un proyecto piloto de balanceo de antivirus perimetral con la solución de Radware Content Inspection Director.
La inversión total que la Universidad ha destinado al proyecto de balanceo de cargas suma 200.000 euros, -100.000 euros en 2005 y otros 100.000 euros en 2009 para la renovación de la infraestructura-.
BENEFICIOS
• Ahorro total de 896.600 euros
• Disminución del consumo eléctrico en un 74 por ciento
• Reducción en el despliegue de servicios de varios días a cuatro horas
• Mismos recursos desde hace tres años en el área de sistemas con crecimientos anuales de servicios de más del 30 por ciento en los últimos cinco años
• Ratio de asignación de 30 servidores por técnico aproximadamente
• Consolidación de más de 150 servidores físicos
• Recuperación de cualquier servicio virtualizado en menos de 60 minutos

¿Qué te ha parecido este artículo?

La tua opinione è importante per noi!

Redacción

Artículos relacionados