En abril se cumplen doce meses del nacimiento de DXC Technology, resultado de la fusión entre CSC y la división de servicios de HPE. Un ejercicio que ha supuesto un espectacular empujón para esta firma que nació, como explica Juan Parra en una entrevista concedida a Computing, con el objetivo de “crear una empresa líder en el mundo de los servicios TI con independencia tecnológica y capaz de guiar a sus clientes en sus procesos de transformación”. El propio nombre Digital Transformation Company iba impreso en sus siglas DXC.
Un año después, la firma ha cumplido su primer reto sin problemas: “que la integración se hiciera de una forma rápida y de una forma sólida”. Dato que constata un reciente estudio de Quint Wellington que sitúa a DXC “en el pódium de las empresas de servicios desde el punto de capacidad de servicio y valoración del usuario”, formando parte de un grupo selecto de compañías como Indra, Everis, Accenture o Iecisa, según explica Parra.
En el Ranking 2018 de las 100 primeras empresas TIC elaborado por Computing, DXC ya ocupa la plaza 23 con 350 millones de euros de facturación, y una plantilla de 4.200 empleados. “Mientras que el mercado de los servicios crece en España a un ritmo del 3%, DXC ha crecido en su primer año cuatro veces por encima del mercado”, detalla el directivo, que se enorgullece de haber contratado unos 1.200 nuevos empleados; señal de que su negocio va sobre ruedas y que requiere reforzar su fuerza laboral para afrontar nuevos proyectos.
El propio nombre Digital Transformation Company iba impreso en sus siglas DXC
Este crecimiento y nuevas contrataciones se han producido a nivel nacional, en los trece centros de Delivering que tiene en España, reforzándose con personal con conocimiento y poniendo foco en la formación y reciclaje de los empleados.
A nivel global, los resultados de la corporación también han sido positivos, mejorando trimestre a trimestre las expectativas, tanto desde el punto de vista de ingresos como de rentabilidad, “y la mejor prueba es que el valor de la acción se ha multiplicado por dos”.
Para su segundo ejercicio, las previsiones no pueden ser mejores, Juan Parra asegura que la “independencia del fabricante” (algo que no se producía cuando estaban en la órbita de HPE) le ha permitido conformar un equipo de alianzas nuevo con fabricantes de software, y hace que los clientes perciban a DXC como un socio de confianza y versátil.