La evolución de las partidas presupuestarias destinadas a Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) del sector Industria se mantiene en consonancia con la tendencia generalizada prevista para 2003 crecerá, aunque a un ritmo más lento.
Estas empresas invertirán 0,5 millones de euros de media contemplando las respuestas de las entidades indecisas, lo que sitúa a este sector en segunda posición por delante de Administración y tras las compañías pertenecientes a la partida de Finanzas.
Si tenemos en cuenta las entidades indecisas, la inversión se reduce hasta una media de 0,32 millones de pesetas, compartiendo el segundo puesto junto a la Administración y tras Finanzas.
A pesar de este ascenso, Industria queda por debajo de la media global que contempla todos los sectores 0,55 millones de euros.
No obstante, resulta necesario destacar que el sector Finanzas empuja hacia arriba una media global bastante superior a la contemplada en los presupuestos informáticos para el ejercicio 2002.
En cuanto a la distribución por cantidades y aunque la mayoría de ellas cuenta con presupuestos inferiores a los 0,06 millones de euros, se reducen significativamente las empresas que destinan una cantidad inferior a los 0,03 millones de euros, a la vez que crece el número de ellas que invertirán en el rango comprendido entre los 0,6 y 3.01 millones de la misma moneda se pasa del 3,7 previsto para 2002 al 10,2 por ciento que se estima este próximo año.
Por lo demás, los valores se mantienen constantes en la franja de hasta 15,03 millones de euros invertidos, ya que ninguna de las firmas pretende superar esta cantidad.
Por otra parte, aunque un 36,7 por ciento de las compañías industriales prevé incrementar su inversión en TIC respecto al año anterior, el porcentaje cae significativamente, para pasar a engrosar el número de empresas que simplemente mantienen el presupuesto un 37,9 respecto al 29,8 por ciento que podíamos observar en los presupuestos para 2002.
No obstante, esta variación porcentual está cercana al descenso inversionista de la media de todos los sectores, aunque queda algo por detrás en cuanto al porcentaje de empresas que incrementarán su inversión el próximo ejercicio.
Igualmente, el cociente derivado del total presupuestado por inversión destinada a cada trabajador se incrementa alcanzando el 0,24 de media, lo que supone cerca de 1.500 euros invertidos por cada empleado.
Esta cantidad sitúa a Industria -que mantiene su ratio con respecto a 2002- en tercera posición al compararse con el resto de sectores, tras los más de 12.000 y 1.560 euros pesetas como los valores más altos en las áreas de Finanzas y entidades públicas, respectivamente.
Los porcentajes por áreas de actividad reflejan que Industria dedica la mayor parte de su inversión al apartado de hardware, con un 37,9 por ciento; seguidamente se sitúa el software, con un 30,2 por ciento y un descenso de 1,6 puntos porcentuales.
Esta tendencia se observa también en los dos años anteriores, mientras el apartado de comunicaciones crece 0,3 puntos y servicios experimenta una caída inversionista de tan solo el 0,1 por ciento frente a los presupuestos previstos para 2002.
Aunque estos datos se mantienen aproximadamente en la media de todos los sectores, dentro del peso específico de la inversión destinada por Industria a los servicios es importante destacar un significativo avance en la cantidad para el mantenimiento del hardware, que supera considerablemente la partida mantenimiento software; ésta crece menos de un punto porcentual comparado con el ejercicio anterior.
El apartado de consultoría asciende algo, mientras se dedican menos esfuerzos a la formación y el outsourcing cae más de 8 puntos; el segmento integración de sistemas también sorprende, pues en lugar de incrementarse se queda en un minúsculo 0,5 por ciento desde los 1,7 puntos del año anterior.
Si comparamos Industria con las demás actividades, es el sector que más dedica a servicios de consultoría y menos a formación.
En cuanto a los objetivos fijados para destinar su presupuesto, Industria sitúa la mayor productividad y la reducción de costes como los dos prioritarios.
Es así como la atención a clientes -la menor en porcentaje si se compara con el resto de actividades y una media superior al 23 por ciento- y mejorar la calidad pierden el segundo y tercer puesto por orden de importancia respecto a los presupuestos del año anterior.
