La analítica web es una nueva disciplina que se está demandando cada vez más por las empresas, aunque todavía son pocos los profesionales que se dedican al análisis del tráfico de sus portales. Esta conclusión se desprende de un encuentro celebrado bajo el auspicio de la Fundación Telefónica, donde representantes de distintas compañías aprovecharon para debatir el papel de estos nuevos profesionales, que tienen que cumplir con un perfil técnico y estratégico, y al mismo tiempo, creativo y de negocio. Según la directora del departamento de Analítica Web en Panda Security, Gema Muñoz, la profesión de analista web surge ante una creciente necesidad del mercado. A principios de la década de los noventa las empresas empezaron a tener presencia en Internet a través de contenidos estáticos y hasta el año 2000 no empezaron realmente a invertir dinero en funcionalidad, usabilidad, buscadores y redes sociales. Poco a poco va surgiendo la necesidad de que las empresas conozcan todos los datos para usarlos estratégicamente y se crea, recuperando la figura del tendero, la figura del profesional que analiza el movimiento de los clientes en la web. En este proceso, “las empresas deberían invertir en la personalización de las herramientas de análisis web para obtener información realmente útil y datos de valor”, ha indicado Muñoz. Es el analista el que toma decisiones estratégicas apoyadas en los datos. Muñoz añade que actualmente sólo la Universidad British Columbia ofrece estudios reglados en esta materia y, en España, algunas escuelas de negocio lo incorporan en sus materias de postgrado.
Por su parte, el director del estudio de usabilidad y diseño de interacción Seisdeagosto.com, Juan Leal, intervino para hablar de ergonomía y usabilidad de la web, y de la importancia del diseño visual y de la interacción con el usuario. Los profesionales persiguen que el usuario que entre en el site consiga el objetivo de la empresa de manera fácil y sencilla y aspirando a su satisfacción final. En opinión de Leal, se trata de una profesión de futuro con gran potencial, ya que actualmente existen numerosos dispositivos móviles que requieren profesionales que diseñen aplicaciones específicas para organizar los contenidos con criterios de usabilidad.