Los números que Computing extrapola en esta edición de su tradicional Ranking fijan una caída del 1,6% durante 2012, teniendo además en cuenta que muchos de los datos son estimados y a falta de consolidar. Las previsiones a la baja van incluso más allá teniendo en cuenta los datos de firmas analistas y de la propia patronal, que prevé que la disminución sea mayor y se acerque al 4%. Pero lo sorprendente de las estimaciones que circulan en torno al negocio de las TIC no es que éste descienda, en mayor o menor proporción, algo incluso lógico teniendo en consideración la preocupante realidad de la economía en general, sino que las firmas que componen este tejido empresarial ofrezcan, en ocasiones, indicadores al alza en muchos casos sorprendentes y en otras sean reacias a confirmar los datos que manejan.
Estas reacciones parten de una sensación, y es que ante la tan manida crisis el sector tecnológico se está quedando sin oxígeno. Hay compañías que no terminan de arrancar en nuestro país y otras muchas se enfrentan a una falta de imaginación y de proactividad que termina por engullirlas. Mientras, otro bloque se apoya únicamente en el objetivo que supone la reconquista de Latinoamérica.
Días atrás Computing tuvo la ocasión de departir con una representación de directivos de algunas de ellas y la impresión que transmitían es que debe reinar el optimismo de cara a este próximo ejercicio de 2013, pero teniendo en cuenta las dificultades y dureza actuales. Son manifestaciones acertadas teniendo en cuenta que los proveedores deben estar del lado de la transparencia; y es de agradecer cuando reconocen la evolución de su negocio así como las complicaciones que puedan coexistir en estos momentos para estabilizar las finanzas de las organizaciones que representan. Y es que conviene enfatizar el comportamiento de aquellas otras que prefieren esconder la cabeza debajo del ala y dejar pasar de largo la oportunidad de dar la cara y afrontar la verdad sin tapujos, sea ésta cual sea.
