“Cualquiera que lo haya conocido lo recordará bien y quienes lo conocimos bien lo recordaremos siempre. Un hombre que vivió cuatro vidas en una, que tenía un encanto contagioso y, a veces, una impaciencia que podía resultar arrolladora”, reza el obituario de la compañía de Saffron Brand Consultants, firma que fundó junto a Jacob Benbunan, en el año 2001.
Un pionero genuino, Wally fue una de las personas que lideró en sus orígenes el negocio del branding y ayudó después a darle forma. “Él siempre diría que lo hizo junto con sus compañeros y colegas, pero aquellos que tuvimos la suerte de ser sus compañeros sabemos que eso es verdad sólo parcialmente”, continúa el comunicado.
Extrañamente, para un hombre al que se le definiría mejor por su talento prolífico, seguramente se le recuerde, sin embargo, por su increíble generosidad y por su optimismo; fuera regalando su sabiduría a los más jóvenes que querían dedicarse al branding o dando consejo a presidentes para ayudarles a mejorar la marca de su país, Wally siempre estuvo dispuesto a dar mucho más de lo que esperaba recibir.
Increíblemente, a sus 83 años, hace sólo una semana aún tuvo la energía para entusiasmarse con el lanzamiento de su último libro, ‘Brand New’, publicado por Thames & Hudson; lleno de su característico humor, su conocimiento y humanidad, se puede decir que es el mejor.
