Elon Musk ha amenazado con abandonar su compra de Twitter por 44.000 millones de dólares, alegando que la firma de redes sociales no ha proporcionado suficiente información sobre las cuentas de spam (número real de bots) que contiene.
El equipo legal de Musk ha enviado una carta a los reguladores alegando que Twitter no le había proporcionado información precisa sobre la propagación de robots de spam en el sitio; información que tenía derecho a ver en virtud del preacuerdo de adquisición.
“Como posible propietario de Twitter, Elon Musk tiene claramente derecho a los datos solicitados para permitirle prepararse para la transición del negocio de Twitter a su propiedad y para facilitar el financiamiento de sus transacciones”, alega el abogado Mike Ringler en la carta.
“Para hacer ambas cosas, debe tener una comprensión completa y precisa del núcleo mismo del modelo de negocio de Twitter: su base de usuarios activos. Basado en el comportamiento de Twitter hasta la fecha, y la última correspondencia de la compañía en particular, Musk cree que la compañía se está resistiendo activamente y frustrando sus derechos de información”, prosigue la misiva.
Los abogados de Musk dicen que Twitter simplemente se ha ofrecido a dar información sobre los métodos de prueba de la compañía. Argumentan que esto equivale a ignorar las demandas de datos de su representado y constituye una “violación material” del acuerdo de fusión, que le permite a Musk la opción de cancelar el acuerdo si así lo desea.
El CEO de Tesla lleva quejándose del problema de los bots de spam en Twitter durante semanas
Anteriormente dijo que la adquisición estaba “en espera” debido a sus preocupaciones sobre los bots, y que “no puede avanzar” a menos que Twitter demuestre que sus números de spam son precisos.
Por su parte, la compañía ha estimado que las cuentas de spam representan menos del 5% de sus usuarios diarios. El CEO Parag Agrawal dijo el mes pasado que la firma le había dado a Musk una explicación de cómo la compañía calcula las estimaciones de spam.
Pero Musk ha cuestionado esto, afirmando en un tweet de mayo, sin ofrecer pruebas, que el 20% o más de las cuentas de Twitter son falsas.
Los expertos interpretan esta jugada como un caso de “remordimiento del comprador” en un intento de obligar a Twitter a reducir su precio de compra de 44.000 millones de dólares. Si finalmente se cancela la transacción, el dueño de Tesla tendría que abonar 1.000 millones de dólares.
En un comunicado publicado el lunes, Twitter dijo que había estado cooperando con Musk para proporcionar información en línea con los términos del acuerdo de fusión y que la adquisición es en el mejor interés de todos los accionistas.