Cuando peores augurios sobrevuelan en torno a la situación del empleo en nuestro país, considerado como una de las principales preocupaciones para los españoles, nos encontramos con ciertos visos de optimismo después de echar un vistazo al informe anual que elaboran Infoempleoy Adecco, aunque en este caso principalmente al referirnos a los datos relativos a los sectores de informática y telecomunicaciones. En cualquier caso, bienvenidos sean, lo que refrenda que esta actividad continúa consolidando su peso dentro del tejido productivo nacional. De hecho, la situación laboral en telecomunicaciones se consolida entre las diez primeras, con mayor peso dentro del volumen global de oferta, mientras que la informática asciende seis posiciones hasta la duodécima. Las buenas sensaciones también se pueden extrapolar al conjunto del sector de las TIC, que dan muestra de estabilizar su fuerza laboral y miran con otra perspectiva su evolución de cara a 2011; como parte de la globalidad del mercado en nuestro país, es representativo el hecho de que el 70% de las empresas tecnológicas afirme que mantendrá al menos su plantilla durante este año.
Pero volviendo a los datos de Infoempleo, se desprende que los especialistas en informática, telecomunicaciones y contenido multimedia serán los que mejor posicionados estén una vez que se la situación general mejore. Conviene recordar que ya a finales del pasado año el ministro Miguel Sebastián adelantó que el sector que nos ocupa generará cerca de 400.000 empleos durante los próximos cinco años. Son además empleos altamente cualificados y valorados que repercuten directamente en las empresas TIC; de hecho, según Adecco es el sector que más empleo de calidad genera en España.
Por otro lado, queda de manifiesto que las TIC se convierten en una plataforma cada vez más activa de comunicación entre oferta y demanda y que las redes sociales pasan a ser su mejor exponente, o que en las propias empresas de este sector más de un 30% de los empleados son teletrabajadores. Son profesionales que se están adaptando a los nuevos tiempos, continúan con un alto nivel de cualificación y abordan su futuro con grandes expectativas de desarrollo. Y es muy probable que sirvan de estímulo para el repunte del sector TIC en su conjunto.