El tirón del resultado del grupo Dell se debe a la buena marcha de las ventas de ordenadores personales, de los servidores para empresas y de sus aplicaciones para almacenamiento de datos. Así, la facturación del segundo mayor fabricante del mundo de PCs aumentó un 20 por ciento en el último trimestre del año pasado, hasta 8.060 millones de dólares (7.532 millones de euros).
Además, los resultados de la empresa confirman su capacidad de sobreponerse a un mercado en crisis, lo que ha permitido a la compañía aumentar su cuota de mercado en este periodo del 13,2 al 15,7 por ciento, según estimaciones provisionales de IDC.
Por su parte, el director general de la compañía estadounidense, Kevin B. Rollins, se ha mostrado satisfecho por los resultados, señalando que estamos ganando cuota de mercado de forma rentable y logrando unos resultados operativos consistentes, por encima de los del sector.
