Banco Atlántico se suma a la lista de compañías que confían en las tecnologías de gestión de procesos de negocio (BPM) para mejorar sus niveles de eficiencia. Para ello, ha confiado en la tecnología de Staffware y ha seleccionado a TCP Sistemas e Ingeniería como compañero de un viaje -para diseño y mecanización de los procesos- cuyo punto de partida se remonta al año 2000. Fue entonces cuando se finalizó una reingeniería de procesos dentro de la entidad financiera y se abordó la automatización de una parte de sus procesos.
Tal y como apunta Félix Arranz, consultor de negocio de TCP, la tecnología de Staffware se impuso a otras alternativas como IECISA, a pesar de que el banco esté trabajando con Invesdoc para cubrir el capítulo de la gestión documental.
Dentro de las diferentes fases de este proyecto, una de las más complejas es la que afecta a la integración de toda la información residente en el host transaccional, más allá de la evidente integración que es preciso realizar con todas las herramientas documentales y ofimáticas. En el caso de Banco Atlántico, esta complejidad adquirió una nueva dimensión, puesto que desde su departamento interno de informática se estaba desarrollado un nuevo middleware para disponer de acceso multicanal al transaccional.
Entre los procesos automatizados destacan los de activo, tales como el análisis del riesgo crediticio y concesión de préstamos; procesos de pasivo, como los relativos a la apertura de contratos de cuentas personales, depósitos, fondos de inversión, etc.; o los procesos administrativos internos.
Desde el punto de vista tecnológico, la tecnología BPM de Staffware ha sido implementada en un entorno cien por cien Microsoft, con plataforma Windows 2000, en modelo cliente/servidor con una granja de Terminal Servers para los accesos. Adicionalmente, la base de datos a la que se ataca es MS SQL Server, arropada por una configuración en cluster y un planteamiento de arquitectura que no ha descuidado el centro de respaldo. Además, Arranz llama la atención sobre los beneficios obtenidos gracias las herramientas de monitorización del rendimiento implantadas.
Las ventajas, como indica Arranz, son tangibles al abandonar los procesos manuales, junto a la menor necesidad de formación puesto que toda la gestión es muy visual .