A punto de cumplirse tres años desde que Amena iniciará la prestación del servicio GSM, la compañía, que ha logrado captar 4,87 millones de clientes, ha decidido reforzar su apuesta por Internet móvil a través de la ampliación de su oferta GPRS al entorno doméstico (ya cuenta con 1.000 clientes en el ámbito empresarial), tanto de prepago como de pospago.
Un negocio que, según el consejero delegado de Amena, todavía no existe fuera de Japón y que los operadores habrán de definir a lo largo del tiempo. Para empezar los operadores habrán de dar entrada en el escenario a una serie de nuevos actores que, como generadores de contenidos y aplicaciones o intermediarios de pagos, van a jugar un papel esencial en la consecución de una gama de servicios móviles avanzada y completa. Respecto al momento elegido para lanzar GPRS, Belarmino García, consejero delegado de Amena, considera que es ahora cuando existen garantías para ofrecer el servicio al cliente porque el software está depurado y es compatible con el software GPRS de las redes de los operadores. Además, comenta que la oferta de terminales GPRS es lo suficientemente amplia para atender la demanda del mercado. Una afirmación documentada por otras fuentes de la empresa que han indicado que ya disponen de terminales homologados de fabricantes como Motorola (T260, T280, T192M) o Siemens (S45), a los que sumarán en breve equipos de otros suministradores.
Respecto a cuestiones de espectro, García indicó que por ahora a cada uno de los tres operadores móviles se les ha cedido 15 Mhz de espectro (exactamente 2×15 Mhz) y que queda pendiente de entrega 2×10 Mhz, un proceso que sigue su curso y que habrá de hacer quedado resuelto antes del 31 de diciembre de 2002. El directivo prevé que con este nuevo espectro no existan problemas de saturación en varios años.
En relación con UMTS, Belarmino García señaló que ha sufrido un retraso y que a medida que se vaya acercando la fecha para su futuro lanzamiento se volverá a retrasar más. UMTS iniciará su operatividad más tarde de lo que pensábamos hace uno o dos años. Por eso, GPRS tendrá una vida más larga de la que en un principio se preveía.
Por otra parte, el directivo reconoció que se estaba valorando si tiene sentido monetizar parte de los activos de red de la operadora (emplazamientos de antena, los mástiles que alojan las antenas, las estaciones de energía eléctrica que alimentan la red de radio…). El directivo indicó que se está negociando la cesión de 4.000 torres de las 9.000 con que cuenta la operadora y que la decisión final podría tomarse a últimos de enero de 2002. En cualquier caso, García quiso dejar claro que esta operación no es prioritaria y que, de realizarse, afectaría positivamente en la cuenta de resultados, ya que se recibirían unos ingresos extra, al tiempo se compartirían una serie de costes fijos relacionados con el soporte de los emplazamientos.
