En un intento por reactivar la actual marcha de la economía, el fabricante de microprocesadores AMD ha anunciado que obtendrá beneficios en 2002, para lo que enfocará su estrategia en portátiles y servidores, y reduciendo los costes de fabricación.
Jerry Sanders, CEO de AMD, ha perfilado los objetivos de la compañía para el próximo año y comenta que 2002 vendrá definido en gran parte por el éxito en el segmento de los servidores y móviles (portátiles), además de que continuaremos nuestro esfuerzo en el campo de los equipos de sobremesa. AMD intentará de esta forma corregir los resultados obtenidos durante el tercer trimestre de 2001, fecha en la que ha registrado pérdidas de 187 millones de dólares.
Sanders también ha comentado que tratará de romper la relación entre Microsoft e Intel. Así, apunta que en vez de un duopolio, vamos a tener tres jugadores participando en este terreno. El directivo asegura que Intel ha cometido errores, asegurando que Intel está bloqueada porque cuando diseñó el Pentium 4 no esperaba una competición real.
No obstante, Andy Brown, analista de IDC, aclara que no está totalmente convencido de esto. AMD, en la parte de móviles, aún no se ha colocado. El mercado demanda baterías de más duración, y la compañía, de momento, no es capaz de ofrecer esto, opina Brown, quien añade que creo que es muy improbable que Microsoft abandone Intel por AMD. Intel ha estado trabajando duro y no dejará que nadie fuerce su espacio.
Asimismo, declara que Intel ha aprendido la lección cuando Transmeta amenazó con Crusoe, su chip de bajo consumo. Pero apunta que AMD está intentando moverse más cerca de Microsoft y así lo demuestra el nuevo Athlon XP.
Por otro lado, Richard Baker, director de marketing de AMD, afirma que la compañía está lista y es lo suficientemente fuerte en el mercado de servidores para industrias que utilizan aplicaciones tales como diseño asistido por ordenado y creación de contenidos digitales.