La compañía Esker está apoyando y preparando a las empresas para un año clave, en el que deberán cumplir con las directivas europeas en materia de facturación a entidades del sector público. De acuerdo con la directiva de abril de 2014 sobre factura electrónica y compras públicas, en 2020 los proveedores de las distintas administraciones estarán obligados a facturar electrónicamente en todos los países europeos.
Esta directiva supondrá significativos ahorros a los gobiernos, al tiempo que impulsará un importante avance del mercado de la factura electrónica.
En España, según la Ley de Impulso de la Factura Electrónica, publicada en diciembre de 2013, todos los proveedores de la Administración tendrán, a partir del 15 de enero de 2015, la obligación de facturar electrónicamente utilizando el formato Facturae 3.2. En Italia, la misma obligación entra en vigor en marzo de 2015.
En Francia, los proveedores tenían desde el 1 de enero de 2012, la opción de enviar facturas electrónicas a los ministerios del gobierno. La nueva directiva viene a eliminar la posibilidad de elección en todo el sector público, incluyendo las instituciones locales y regionales. La obligación de facturar electrónicamente se extenderá en 2017 a las grandes compañías, y en 2020, a las pymes.
La solución de Facturas a Clientes de Esker, procesa los diferentes formatos de e-factura a utilizar en toda Europa y está preparada para comunicarse con las plataformas que cada administración disponga para enviar las facturas y recibir notificaciones.
